Se estima que uno de cada 40.000 es zurdo y los investigadores querían comprobar si era una cuestión genética

Angus Davison, genetista evolutivo de la Universidad de Nottingham en Reino Unido, puso en marcha en octubre de 2016 la búsqueda de pareja para un caracol muy particular. Se trataba de un caracol zurdo que había recibido en su centro de investigación al que llamó Jeremy, en referencia al político laborista británico Jeremy Corbyn.

Aunque los caracoles son hermafroditas, Davison necesitaba otro caracol con la espiral hacia la izquierda al igual que Jeremy, que también tenía sus genitales en el lado opuesto, para comprobar si esto se debía a una cuestión genética, según informa la agencia SINC.

La mayoría de los caracoles son diestros, por lo que no fue fácil la búsqueda y el caso de Jeremy llegó hasta los medios de comunicación. Su caso fue conocido en el mundo gracias al hashtag #snaillove (#amordecaracol, en español) y se convirtió en una ‘shellebrity’ (conchelebridad, en español).

Esta campaña dio resultado y Davison recibió 45 caracoles de concha levógira procedentes de la naturaleza y de granjas de caracoles. Gracias a estas aportaciones, se consiguió estimar que uno de cada 40.000 caracoles es zurdo y se pudo entender si esto se debía a una cuestión genética.

Posiblemente se deba a un accidente en el desarrollo

Los primeros pretendientes de Jeremy decidieron aparearse entre sí. Esto, lejos de ser un contratiempo, ayudó a en la investigación para saber cómo se formaba esta extraña espiral en otros caracoles zurdos.

En tres años eclosionaron cerca de 15.000 huevos de cuatro generaciones de caracoles, incluidos descendientes de Jeremy. Los investigadores querían comprobar si el fenotipo se debía a un efecto recesivo del alelo materno. Antes de morir, Jeremy consiguió engendrar un tercio de las 56 crías de otro caracol.

Los resultados del estudio, publicados en Biology Letters, muestran que, en lugar de una condición genética, la forma de la concha de Jeremy se debe a un accidente en su desarrollo debido al azar o al entorno, ya que los caracoles zurdos daban, en general, crías diestras.

De los 13 caracoles zurdos originales, ninguna de sus 1.120 crías fue zurda. Tampoco se produjeron casos en las generaciones posteriores. Hubo una excepción en una generación de 32 caracoles mezclados con diestros en Francia, seis de los cuales produjeron una descendencia mixta. En total nacieron 17 crías zurdas de las que 6.302 que eclosionaron.

Aunque el origen de estas conchas se debe más a un accidente del desarrollo, Davison observó que que era más frecuente con la presencia de un alelo dextral, como en el caso de los caracoles franceses que produjeron una pequeña descendencia zurda.

Davison está satisfecho porque “hubo un final feliz para Jeremy para encontrar el amor y producir descendencia, justo antes de morir. Nada de esto hubiera sido posible sin la ayuda del público”. Además, aunque no se pudieron recrear las especiales características de Jeremy, esperan que este caracol les ayude a entender la asimetría corporal y cómo se definen los lados izquierdos y derechos de otros animales, incluso los humanos.

Fuente: 20 minutos.es