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Indicios de un sistema planetario en la estrella vecina del sol

Frías nubes de polvo alrededor de Próxima Centauri, la estrella más cercana al Sistema Solar, sugieren que puede existir un complejo sistema planetario a su alrededor.

La observación, obtenida con el Observatorio ALMA, en Chile, por un equipo liderado por el CSIC, se publica en ‘Astrophysical Journal Letters’.

Proxima Centauri es una débil enana roja que se encuentra a tan sólo cuatro años luz de la Tierra, en la constelación del Centauro. Orbitando a su alrededor está Proxima b, un exoplaneta templado del tamaño de la Tierra descubierto en 2016 –por el español Guillem Anglada-Escudé, profesor de Astrofísica en la Universidad Queen Mary de Londres– y que es el planeta más cercano al Sistema Solar.

«Tras la detección de Proxima b, el descubrimiento de polvo alrededor de Proxima Centauri es el primer indicio de que existe un complejo sistema planetario alrededor de la estrella más cercana a nuestro Sol», explica en un comunicado el primer autor del estudio, Guillem Anglada (no confundir con Guillem Anglada-Escudé), investigador en el Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC).

Estos cinturones de polvo están compuestos por el material sobrante de la formación planetaria. Principalmente, son partículas de hielo y roca con tamaños que van desde granos de polvo de menos de un milímetro hasta cuerpos similares a los asteroides de varios kilómetros de diámetro.

Parte de este material parece encontrarse distribuido en un cinturón que se extiende a unos pocos cientos de millones de kilómetros de Próxima Centauri y con una masa total de aproximadamente una centésima parte de la masa de la Tierra. Además, se ha estimado que tiene una temperatura de aproximadamente -230 grados Centígrados, la misma que la del Cinturón de Kuiper, una estructura similar situada en el Sistema Solar exterior.

Futura exploración directa con micronaves

Según los datos de ALMA, existen indicios de otro posible cinturón de polvo alrededor de Proxima Centauri, diez veces más alejado y mucho más frío que el primero. De confirmarse, este cinturón se encontraría en un entorno muy frío y lejano de una estrella que ya de por sí es más fría y mucho más débil que el Sol. Tanto este como el otro cinturón de polvo se sitúan mucho más lejos de Próxima Centauri que su planeta Próxima b, que orbita a unos cuatro millones de kilómetros de su estrella.

«Este resultado sugiere que Proxima Centauri podría contener un sistema múltiple de planetas con un rico pasado de interacciones que dieron lugar a la formación de uno o varios cinturones de polvo. Estudios más profundos proporcionarán más información para localizar la ubicación de estos planetas adicionales que todavía no han sido identificados», indica Guillem Anglada.

Este sistema planetario de Proxima Centauri sería además «especialmente interesante» según los científicos, ya que hay planes para una futura exploración directa con micronaves espaciales dotadas de velas impulsadas por láser (proyecto Starshot), y conocer el entorno de polvo que rodea a la estrella es esencial para la planificación de este tipo de misiones.

«Estos primeros resultados muestran que ALMA puede detectar estructuras de polvo en órbita alrededor de Proxima», indica por su parte el coautor del trabajo, Pedro Amado, también investigador del IAA-CSIC. «Observaciones de mayor resolución nos darán más detalles de su posible sistema planetario –explica–. Y combinándolas con el estudio de discos protoplanetarios alrededor de estrellas jóvenes, podremos desvelar muchos de los detalles de los procesos que condujeron a la formación de la Tierra y del Sistema Solar hace unos 4.600 millones años. Lo que estamos viendo ahora es sólo una pequeña parte de lo que está por venir».

Investigadores españoles

Según subraya el CSIC, estos son los primeros resultados de un proyecto más ambicioso, diseñado conjuntamente por varios departamentos del Instituto de Astrofísica de Andalucía para caracterizar las condiciones del sistema planetario de Proxima Centauri. «Estamos combinando nuestros conocimientos en el Sistema Solar, en física estelar, y en la formación de discos alrededor de estrellas, así como en diferentes técnicas de observación para obtener la imagen más completa posible sobre el sistema planetario más próximo al nuestro», concluye Antxon Alberdi, director del Instituto del CSIC y otro de los coautores del trabajo.

En el estudio han participado más de 20 investigadores, la mayoría de ellos del IAA-CSIC, junto a científicos de la Universidad de Boston, Massachusetts (Estados Unidos); del Observatorio de ALMA de ESO, en Santiago (Chile); de la Universidad Queen Mary de Londres –uno de ellos, el descubridor de Proxima b, Guillem Anglada-Escudé–; de la Universidad de Zaragoza; de la Universidad de Santiago (Chile); del Institut de Ciències de l’Espai (IEEC-CSIC), en Bellaterra (España); y del Jodrell Bank Centre for Astrophysics (JBCA) de la Universidad de Manchester.

Fuente: Europa Press