Guía práctica para lavar la cisterna y tinaco del hogar
Lavar la cisterna y tinaco del hogar es una tarea de suma importancia que se debe llevar a cabo de forma periódica. Al mantener el agua doméstica limpia y desinfectada no solo se mejora el bienestar familiar, sino que, además, se contribuye a su buen estado de salud.
Las cisternas y los tinacos son los depósitos de agua más comunes en comunidades de vecinos y domicilios, respectivamente. Por ello, ante la necesidad de mantener la potabilidad del agua, cada vez es mayor el número de personas que invierten en el lavado de cisterna y tinaco.
Aunque este tipo de tareas se pueden llevar a cabo por cuenta propia, que lo realicen profesionales garantiza la salubridad del vital líquido. No se puede olvidar que el suministro de agua suele traer consigo un pequeño porcentaje de sedimentos y microorganismos que se acumulan y multiplican con el paso del tiempo.
¿En qué consiste el lavado y desinfección de las cisternas y tinacos?
Son tareas llevadas a cabo por un plomero profesional: la primera etapa consiste en la extracción del agua para vaciar el depósito, después de haber cerrado la llave del suministro.
El segundo paso es el lavado a presión a través de una hidrolavadora que se encarga de limpiar y desinfectar la superficie. De esta manera, se elimina el moho y se retiran las partículas sueltas y los residuos que contaminan el agua.
El siguiente paso en el procedimiento para lavar la cisterna es el tallado y el cepillado del depósito con el objetivo de llevar a cabo una limpieza profunda de la superficie. Finalmente, se realiza el proceso de desinfección que implica el uso de desinfectantes biodegradables, así como el uso de pastillas tricloro para contribuir a la limpieza del agua durante un mayor plazo de tiempo.
¿Por qué es idóneo que un plomero lave la cisterna y tinaco?
Como se señaló al inicio, el lavado de cisternas y tinacos es una tarea que se puede llevar a cabo por cuenta propia. A pesar de ello, se recomienda la contratación de profesionales, ya que los plomeros evitan descomposturas y averías en la bomba de la cisterna, así como en la red de agua.
Asimismo, estos profesionales evitan que los residuos se vayan por la tubería, eliminando la posibilidad de obstrucciones en la misma. Además, es necesario destacar que los plomeros poseen los conocimientos necesarios para reparar cualquier fuga o realizar cualquier tarea de mantenimiento que requieran las cisternas y tinacos.
Beneficios de lavar la cisterna y tinaco cada 6 meses
Uno de los beneficios de lavar la cisterna y tinaco de forma habitual es la posibilidad de reducir la presencia de microorganismos que contaminan el agua. Por ejemplo, se evita el crecimiento de algas en las paredes, así como la acumulación de sedimentos y lodo en el piso del depósito, manteniendo el agua incolora, inodora y con buen sabor al momento de beberla.
Como se puede ver, lavar la cisterna y tinaco de las viviendas o comunidades es una inversión de gran utilidad. Gracias a este proceso, las familias tienen la posibilidad de ampliar el uso del agua para realizar tareas culinarias, así como para bañarse o llenar una piscina.