Exploran un estanque en Bolivia y descubren una especie que se creía extinta desde hace 20 años

El pez killi estacional, conocido en el ámbito científico como Moema claudiae, ha sido redescubierto en un estanque del departamento de Beni, en Bolivia. La última vez que se consiguió observar en estado salvaje fue hace más de dos décadas. Este hecho, unido a que se trata de una especie endémica y a que la mayor parte de su hábitat fue destruido debido a la conversión agrícola de la región, hizo pensar a los investigadores que se había extinguido. Por suerte, no ha sido así.

El redescubrimiento ha sido documentado a través de la revista Nature Conservation y ha revertido lo dispuesto por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que había catalogado al pez killi estacional dentro de la categoría en peligro crítico y probablemente extinto. Fue llevado a cabo por Heinz Amo Drawert y Thomas Otto Litz, quienes localizaron los ejemplares vivos en un pequeño remanente de bosque rodeado de cultivos en la cuenca del río Mocoví.

Thomas Litz aseguró en el informe que el redescubrimiento de Moema claudiae “demuestra que ahora tenemos la oportunidad de preservar esta especie en estado silvestre”. También hizo énfasis en el nuevo hábitat de este animal, ya que los peces fueron encontrados en un estanque de aguas negras, temporal y de poca profundidad en una zona en la que limita la selva amazónica con las sabanas de los Llanos de Moxos.

Otras seis especies de peces killi

Más allá de Moema claudiae, los investigadores pudieron documentar otras seis especies de peces killi estacionales o rivúlidos en el mismo lugar. Esta convergencia convirtió el enclave en el conjunto genéticamente más diverso que se ha documentado a escala global, superando los registros anteriores que solo habían llegado a documentar cinco.

El estudio también reflexiona acerca de la vulnerabilidad de estos peces estacionales, los cuales habitan en pequeños humedales no permanentes que se destruyen y alteran con suma facilidad. Especialmente, en un país como Bolivia, que está sufriendo una considerable pérdida de bosques tropicales primarios a causa de su conversión en terreno de cultivo. Solo en los últimos 25 años, la nación habría visto desaparecer 10 millones de hectáreas por este motivo.

La contaminación con agroquímicos, las alteraciones hidrológicas y la degradación ambiental son los principales factores de riesgo para Moema claudiae. Pero no solo para esta especie, sino también para los otros 32 rivúlidos registrados, de los cuales 19 son endémicos.

Fuente: msn.com

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *