Descubren rastros de una misteriosa población humana antigua que habitó Colombia hace miles de años
Se trata de un grupo humano de linaje desconocido y sin parentesco con otros pueblos indígenas de América. ¿Cómo es que desaparecieron estos antiguos humanos en apenas unos miles de años?
La investigación genética está ayudando considerablemente a los científicos a comprender mejor la historia demográfica de América (aunque aún queda mucho por descubrir, claro está) que, a medida que los grupos divergieron tras migrar desde América del Norte y desplazarse hacia el sur, desarrollaron perfiles genéticos distintivos.
Ahora, un equipo de investigadores ha identificado un nuevo grupo de antiguos cazadores-recolectores que vivió cerca del puente terrestre entre América del Norte y América del Sur hace unos 6.000 años.
Primeros habitantes de Sudamérica
Colombia se desempeñó hace miles de años como una puerta de entrada poblacional muy importante y los científicos han encontrado evidencia de un pueblo previamente desconocido que habitó precisamente esta zona. Han conseguido rastrearlo gracias al análisis de ADN de 21 conjuntos de restos humanos que se recolectaron en cinco sitios del Altiplano, en el centro de Colombia.
Los científicos lograron rescatar fragmentos de ADN directamente de huesos y dientes que abarcan casi seis milenios de historia, llegando hasta un momento justo antes de que empezara la colonización española. Los ejemplares más antiguos proceden del yacimiento arqueológico de Checua, situado al norte de lo que hoy es Bogotá, a unos tres mil metros de altura sobre el nivel del mar.
Y lo más fascinante de todo no es que hace 6.000 años pudo haber una población antigua no conocida hasta ahora -que ya de por sí es impresionante-, sino que podrían haber sido algunos de los primeros pobladores de Sudamérica, ya que estos no estaban emparentados con otros grupos indígenas conocidos de América del Norte o del Sur.
Los científicos no están seguros de su ubicación exacta en el árbol genealógico, ya que no están estrechamente relacionados con los antiguos nativos americanos de Norteamérica ni con los sudamericanos antiguos o actuales.
«No pudimos encontrar descendientes de estos primeros cazadores-recolectores del altiplano colombiano; los genes no se transmitieron», explicó la antropóloga Kim-Louise Krettek, de la Universidad de Tubinga, en Alemania y coautora del trabajo que recoge la revista Science Advances.
Pero lo que está claro es que apenas 4000 años después, estos antiguos humanos, que eran cazadores-recolectores precerámicos, habían desaparecido y les había reemplazado un clan humano genéticamente distinto que probablemente hablaba lenguas chibchas, y que tienen vínculos genéticos conocidos con grupos modernos de la parte baja de Centroamérica.
Sin rastro en ADN moderno
Sorprendentemente, la comunidad más antigua no dejó rastros genéticos en poblaciones posteriores, lo que indica que sus descendientes desaparecieron sin mezclarse con los que llegaron posteriormente. ¿Qué sucedió? ¿Por qué desaparecieron sin dejar rastro? Los investigadores no tienen claro el motivo, por lo que será necesario un análisis genético de mayor profundidad para intentar resolver este enigma y reconstruir de camino la historia de América. ¿Habría sido a causa de una enfermedad?
«Que los rastros genéticos de la población original desaparezcan por completo es inusual, especialmente en Sudamérica», apunta la genetista Andrea Casas-Vargas, de la Universidad Nacional de Colombia. Analizar más genes en Sudamérica ayudará a confirmar si este nuevo grupo realmente desapareció o si podría haber evidencia de sus descendientes en otros lugares, sugieren los investigadores.
Lo cierto es que los exámenes genéticos muestran que hace 2.000 años, estos antiguos habitantes del Altiplano fueron reemplazados por un grupo diferente procedente de Centroamérica, vinculado a la cultura Herrera, conocida por su alfarería y prácticas agrícolas avanzadas como el cultivo del maíz.
Aún quedan muchas preguntas sin resolver, pero para los arqueólogos este lugar es particularmente importante de analizar por tratarse del puente terrestre entre Sudamérica y el norte del continente, por lo que está claro que las respuestas están esperando en alguna parte.
Fuente: historia.nationalgeographic.com.es