Según los investigadores, estos patógenos presentan formas “inimaginables”: tortugas, estrellas, cabezas de Medusa y otras
Virus gigantes de formas nunca antes conocidas fueron descubiertos por un equipo de científicos de la Universidad de Massachusetts y del Instituto Max Planck de Investigación Médica (Alemania). Estos microorganismos no vivientes, de tamaños más grandes que el promedio, estaban presentes en puñados de tierra recogida de bosques, cerca de Boston, en Estados Unidos.
¿De qué tamaño pueden ser estos pequeños seres y cómo pueden ser tan grandes? Los peculiares virus, cuyo hallazgo se anunció recientemente mediante una preimpresión, miden hasta 635 nanómetros (nm) de ancho, lo cual supera a las medidas más comunes que suelen encontrarse. Por ejemplo, los virus de la influenza miden entre 80 a 120 nm de diámetro, el virus del COVID-19 tiene entre 50 y 140 nm.
Además, las formas que presentan sorprendieron a los científicos. Para observarlos de mejor manera, fueron trasladados desde Harvard Forest hasta el Instituto Max Planck en Alemania, donde utilizaron microscopía especial para magnificar los objetos de observación.
“Descubrimos que los suelos del bosque de Harvard contienen una mayor diversidad de morfotipos VLP gigantes que todos los virus gigantes aislados hasta ahora combinados”, indica el documento de investigación preliminar.
¿Qué formas tenían los virus?
“Descubrimos cápsides icosaédricas gigantes con modificaciones estructurales que no habían sido descritas antes incluyendo apéndices tubulares, vértices modificados, colas y cápsides que consisten en múltiples capas o canales internos”, detalla la preimpresión. Para emplear términos más sencillos, las formas fueron comparadas por los científicos con imágenes más conocidas.
Algunos de los virus fueron descritos como morfotipos de “tortuga” porque tenían extremidades (apéndices lobulados) dispuestas en patrón simétrico, alrededor de la cápside —la cobertura que envuelve el material genético—y podían asemejarse a patas bajo un caparazón.
Otro de los virus fue denominado ‘Gorgona’ porque poseía formas tubulares que emergían de su centro, lo cual relacionaron con la figura de Medusa, personaje de la mitología griega.
Entre las peculiares formas también encontraron un virus que, según los científicos, se parecía un uno de los antiguos muñecos ‘Trolls’, por lo que lo denominaron ‘Corte de pelo’.
Por otro lado, indicaron como ‘Supernova’ a la forma de algunos virus que poseían fibras cerca a la capa de la cápside y especies de zarcillos ubicados en el espacio.
Una de las formas más originales que fueron halladas fue la llamada ‘Estrella de Navidad’, pues un virus presentaba un caparazón de doble capa que se asemejaba a triángulos entrelazados, como si formaran la imagen de una estrella. La cápside interna medía 285 nemátodos, mientras la cápside externa 385 nm.
“Nuestro estudio ofrece una primera visión de la gran diversidad de estructuras virales inexploradas en el suelo y refuerza el potencial de la microscopía electrónica de transmisión para descubrimientos fundamentales en microbiología ambiental”, indican Matthias G. Fischer, Ulrike Mersdorf y Jeffrey L. Blanchard, responsables del estudio.
Fuente: larepublica.pe