La iluminación selectiva del hipocampo de ratones tuvo éxito en eliminar lecciones previamente aprendidas. Los neurocientíficos señalan que los resultados pueden abrir paso a tratamientos contra el alzheimer o la esquizofrenia en humanos
La ciencia de la alteración de memoria cada vez se aleja más de la ficción. Esta vez, un nuevo sistema óptico-neurológico (una técnica basada en luz) ha demostrado que es posible “borrar” los recuerdos de ratones de laboratorio antes de que se consoliden en su memoria. La investigación estuvo dirigida por el médico de la Universidad de Kioto, Akihiro Goto, y se publicó en la revista Science.
A modo de una analogía simple, la memoria funciona de manera similar al almacenamiento en un ordenador. Primero se recibe un archivo (información) en un lugar específico y luego se guarda en una carpeta para tenerlo disponible en un futuro. Es decir, los recuerdos se adquieren y quedan en la memoria a largo plazo en un proceso llamado consolidación de la memoria.
Aunque esa es la premisa básica, el cerebro funciona de una manera mucho más compleja, ya que funciona en base de 100.000 millones de neuronas. Estas en su conjunto comparten entre sí señales eléctricas y químicas a una velocidad increíble, creando una red de comunicación muy superior en velocidad y conexiones a cualquier computadora.
El aumento de la actividad neuronal -es decir, la comunicación entre ellas- depende de un proceso llamado potenciación a largo plazo o LTP. Diversos estudios, han señalado que este proceso también es el sustento del aprendizaje y la memoria.
Cómo “borrar la memoria”
Según el equipo de neurocientíficos de la universidad de Kioto, el método consistió en iluminar principalmente el hipocampo de los ratones para inhibir la cofilina, una proteína esencial para la sinapsis. El hipocampo tiene como función que el recuerdo pase a la memoria de largo plazo.
La técnica, asegura Goto, fue inspirada en la película de ciencia-ficción Hombres de Negro. “En Men in Black, los agentes borran los recuerdos con un destello de luz. Hicimos algo similar”, sostuvo en un comunicado en EurekaAlert.
Durante los experimentos, los científicos irradiaron luz en los cerebros de los roedores en dos momentos específicos: cuando aprendió una tarea y durante el primer sueño después del aprendizaje. El resultado, según el equipo, fue que la manipulación selectiva de LTP en el hipocampo (específicamente el área CA1) les hizo perder la memoria de la lección, según Goto.
“Fue sorprendente que la eliminación de la LTP local, mediante la iluminación dirigida, borrara claramente la memoria”, comentó Goto en el informe.
El equipo asegura que los resultados del estudio puedan generar avances contra otras anomalías neuronales también relacionadas a la LTP, tales como el alzheimer o la esquizofrenia.
La modificación selectiva de la memoria es un hallazgo novedoso, ya que otros fármacos que alteran la LTP suelen tener efectos generales. Sin embargo, aún faltaría que este mismo método sea aprobado en la población humana.
Fuente: larepublica.pe