Alumnas del Tecnológico de Monterrey campus Puebla crearon un dispositivo similar a una toalla femenina, aunque esta cuenta con esferas inteligentes en su interior que cambian de color ante las variaciones de pH, acción que ayuda a prevenir infecciones en la zona íntima femenina.
Por el invento, que es una prueba rápida, eficaz, desechable y de muy bajo costo, María Fernanda Nava Mandujano y Adriana Varga Landa ganaron el concurso Jump Chile 2018, el cual tiene como objetivo impulsar a los estudiantes de educación superior a transformar sus ideas en modelos de negocios para formar una nueva generación de emprendedores y agentes de cambio con impacto global.
LifeDrop, nombre del dispositivo no invasivo, en un pantiprotector femenino que cuenta con esferas inteligentes que reaccionan al pH del flujo vaginal y cambian de color, lo que dirá a la usuaria si está sana o si tiene que acudir al ginecólogo para una revisión más especializada.
“Lo que busca este dispositivo es dejar a un lado métodos más invasivos que le generan a las mujeres cierto temor o recelo a la hora de hacerse las pruebas. Esto a veces las orilla a que ni siquiera se atrevan a ir a una consulta ginecológica”, explica María Fernanda Nava.
La idea de las estudiantes de la Escuela de Arquitectura, Arte y Diseño del Tecnológico de Monterrey fue crear un wearable (tecnología vestible) enfocado a la salud. Ellas eligieron acercarse al mercado femenino pues descubrieron que las enfermedades del cuello del útero están entre las principales causas de muerte para las mujeres mexicanas y una forma de prevenirlas es con un diagnóstico temprano de cualquier cambio en los fluidos de la zona vaginal.
“La salud es difícil en México, pero las cosas relacionadas con salud sexual de la mujer son un tabú. Como mujeres sabemos cuándo hay algo raro en el cuerpo, el flujo se siente distinto, hay molestias. Ahí es donde nosotras queremos entrar con LifeDrop como una prueba para cerciorarse de que efectivamente necesitan ir al médico e invitarlas a ir al ginecólogo”, agrega María Fernanda.
Cabe destacar que el certamen Jump Chile es uno de los más importantes sobre emprendimiento universitario de Sudamérica, que ayuda a los estudiantes a identificar problemas y oportunidades para desarrollar y validar modelos de negocios. En sus diez años de existencia es la primera vez que lo ganan jóvenes no nacidas en Chile.
En la competencia 2018 participaron 2 mil 936 proyectos de alumnos de todo el continente americano. La semifinal congregó a 104 competidores con 30 proyectos. Del total de iniciativas que alcanzaron esta instancia, 73.3 por ciento provenía de Chile, mientras que el 26.7 por ciento lo hacía de Colombia, Bolivia, Perú, México, Uruguay y Argentina.
Gracias a esta victoria recibirán un año de asesoría y apoyo para transformar LifeDrop en un modelo de negocio real. Además, el premio las colocó directamente en la semifinal del International Business Model Competition en Jamaica, donde podrán competir con proyectos de 27 países del mundo.
María Fernanda Nava comenta que pretenden llevar LifeDrop a comunidades marginadas. “Nos daría mucha felicidad que LifeDrop sea accesible y en algún momento pueda llegar a mujeres de escasos recursos para invitarlas a cuidar su salud. Hay mujeres que nunca han ido a una consulta ginecológica y queremos apoyarlas en eso, lograr un tema de prevención y atención médica”. (Agencia ID)