Un equipo interdisciplinario de estudiantes del Instituto Tecnológico de Colima desarrolló un sistema de monitoreo de signos vitales que muestra los resultados en tiempo real. La pulsera y el dedal que lo conforman pueden ser usados por quienes deben registrar este tipo de información a médicos o cuidadores: por ejemplo, bebés menores de dos años, adultos de la tercera edad y personas con capacidades diferentes que no pueden manifestar su sentir ni verbal ni físicamente.
Vita Data se encuentra en trámite de patente y ha llamado la atención de posibles inversionistas. Asimismo, representará a la institución académica en el Evento Nacional Estudiantil de Innovación Tecnológica, que organiza el Tecnológico Nacional de México.
Horacio de Jesús García Vázquez, integrante del equipo científico del Tecnológico de Colima, explica en entrevista que el dispositivo registra información de tres signos vitales: ritmo cardiaco, nivel de oxígeno en la sangre y temperatura corporal.
El hardware está formado por una pulsera que se coloca en el brazo izquierdo del usuario y un dedal que va al dedo índice. Por medio de sensores se da registro en tiempo real a la información requerida, la cual es enviada por software a una computadora y/o teléfono celular, a fin de ser interpretada por un médico o por los padres en el caso del bebé.
Para facilitar esta labor, el tipo de alerta se contempló como de semaforización; es decir, si se tratara de un momento de emergencia se emitirá una señal visual de color rojo. El sistema aloja la información en una base de datos para que médicos o asistentes usen el dispositivo tengan acceso al historial.
García Vázquez refiere que el proyecto inició con estudiantes de mecatrónica, y buscaron atender el problema que puede representar la muerte de cuna, en la que los menores pierden la vida en un evento fortuito mientras los padres duermen. Recibieron asesoría médica por especialistas del IMSS de la que aprendieron los parámetros necesarios para un diagnóstico oportuno en tiempo real.
El proyecto creció y decidieron incorporar a compañeros de la carrera de ingeniería industrial y alguien más de sistemas para mejorar el diseño y facilitar el uso.
El desarrollo ha sido reconocido por las innovaciones en el uso de tecnología, sino también por el potencial emprendedor de sus creadores a nivel estatal.
“No es invasivo y tampoco impide la movilidad de quien lo usa. Hasta ahora se ha probado en menores de dos años, adultos de la tercera edad, personas con capacidades diferentes y con problemas cardiacos, pero la idea es que lo pueda usar cualquier individuo.
“Trabajamos ya en una pulsera para los papás de los niños para que sea un canal de comunicación sobre los signos vitales del bebé y no tengan que depender del celular o una computadora, sino que en ese dispositivo vean la información que se requiere, o bien para al médico tratante”, puntualiza García Vázquez. (Agencia ID)