El Pleno del Senado de la República recibió de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) el Estudio sobre la Igualdad entre Mujeres y Hombres en materia de Puestos y Salarios en la Administración Pública Federal 2015.

La CNDH estudió los puestos de mando, medios y superiores, y sus salarios, en la administración pública federal (APF); y abarcó a la población trabajadora en 21 instituciones, que forman parte del Sistema Nacional para la Igualdad de Mujeres y Hombres.

En estas instituciones hay 55.5 por ciento de hombres y 45.5 por ciento de mujeres, y de éstas, 44.5 por ciento ocupan puestos de mando; destaca que el porcentaje superó la meta prevista en el Programa Nacional para la Igualdad de Oportunidades y no Discriminación contra las Mujeres 2013-2018, que también fue superada en 16 de las instituciones analizadas.

Solamente en cinco no se alcanzó: la Secretaría de Marina; la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación; la Secretaría de Comunicaciones y Transportes; la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos y en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

Asimismo, analizó las brechas salariales, sin las prestaciones en especie, y los puestos de mando, así como las acciones realizadas tendientes a cerrar la brecha de género en estos dos aspectos, específica el estudio.

Detalla que el año pasado las mujeres ganaron 7 por ciento menos que los hombres, y esa diferencia salarial aumentó a 21 por ciento entre las personas empleadoras, y a 13 por ciento entre quienes trabajan por cuenta propia, pero es mínima entre los trabajadores subordinados

Especifica que en los promedios de ingresos por horas trabajadas y grupos de ocupación, las diferencias salariales son menores, aunque las mujeres llegan a ganar 22.6 por ciento menos que los hombres cuando realizan trabajos industriales; 14 por ciento menos si son funcionarias, directivas o comerciantes; y 9.4 por ciento menos si son profesionales y técnicas.

Enfatiza en que si las mujeres ganan igual salario por igual trabajo que los hombres, y tienen las mismas posibilidades que ellos de ser nombradas en puestos de mando, habrá mayores probabilidades de que se las vaya reconociendo como iguales.

En cuanto a educación, la CNDH refiere que las mujeres más jóvenes ya están superando a los hombres de su generación; y paralelamente se observa su creciente participación en el mercado laboral.

Entre 1990 y 2015, dicha participación se incrementó de 36 a 42.5 por ciento; este aumento obedece, entre múltiples factores, al incremento de la escolaridad de las mujeres, señala la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.

Sin embargo, los avances en materia de igualdad laboral de las mujeres no corresponden con los que han tenido en materia de la igualdad educativa, destaca.

Aunque, si bien la mayor educación de las mujeres contribuyó a que se cerrara la brecha de desigualdad en lo que se refiere a su participación en el mercado laboral, no alcanzó a lograr que se eliminara, debido a que otros factores lo impidieron.

La CNDH estima que el solo hecho de vivir en pareja limitó la participación de las mujeres en el mercado laboral y sus horas de trabajo; y fueron mayores las tasas de participación de las solteras, separadas, divorciadas y viudas, con o sin hijos, que las tasas de participación de las casadas o en unión libre, sobre todo entre los 25 y 49 años.

 

El Estudio sobre la Igualdad entre Mujeres y Hombres en materia de Puestos y Salarios en la Administración Pública Federal 2015 fue turnado a las comisiones de Derechos Humanos, Para la Igualdad de Género, y de Trabajo y Previsión Social.