Como parte de un experimento que buscaría proporcionar ayuda médica en misiones en Marte, el astronauta Alexander Gerts controló desde el espacio un robot que se encontraba en la Tierra.
Las pruebas se realizaron desde la Estación Espacial Internacional (ISS) a una altitud de cerca de 248 millas, desde donde el robot Justin, que se encontraba en el Centro Espacial Alemán (DLR), fue dirigido con éxito.
El objetivo era probar a este robot en diferentes escenarios y a una distancia considerable, con la finalidad de que en un futuro este tipo de máquinas sean útiles para el mantenimiento y reparación de paneles solares instalados en Marte.
La primera operación se llevó más tiempo de lo esperado, esto por algunos ajustes que se hicieron a la tableta de Gerts, respecto a la posición real de Justin en la Tierra.
Y es que se pretende que las máquinas aligeren tareas de los astronautas, pero como antes se mencionó, la prioridad es que los robots puedan otorgar asistencia médica en largas misiones a Marte, dado que los androides podrían ser teledirigidos por médicos desde la Tierra.
En la actualidad, en la Tierra, ya se utilizan algunos robots dirigidos a distancia. Son empleados para asistir a personas mayores y enfermos.
Además de servir para algunas catástrofes, las máquinas pueden realizar tareas que resultan sumamente peligrosas para el humano.
Fuente: elnuevodia.com