Los pediatras y psicólogos están cada vez más seguros de lo peligroso que un smartphone puede ser para la capacidad cognitiva y cerebral de los menores de edad, especialmente los menores de 14 años.
Según una investigación redactada en el libro titulado Screen Schooled de los educadores Joe Clement y Matt Miles, los alumnos adolescentes corren hasta un 27 por ciento de posibilidades de caer en depresión por usar en promedio tres horas al día los celulares con redes sociales y videojuegos. Incluso esta cifra se inclina al aumento de suicidios en adolescentes en todo Estados Unidos.
Ni para los hijos de los genios
“Resulta revelador que dos genios de la tecnología más importantes de la historia reciente, rara vez hayan dejado a sus hijos usar sus propios productos”, dijeron Clement y Miles refiriéndose ni más ni menos que a Bill Gates, creador de Microsoft, y Steve Jobs de iMac.
El propio Gates reveló en 2007 que el uso de tecnología resulta adictivo. Fuentes cercanas a Gates aseguran que cuando su hija comenzó a usar los videojuegos y computadoras, su papá programó un límite de tiempo en los dispositivos de su hija. Tampoco dejó que tuvieran celulares hasta cumplir los 14 años.
En 2011, poco antes de su muerte, Steve Jobs dijo en una entrevista para el NYT que sus hijos tenían deliberadamente prohibido usar tabletas o iPhones al lanzar la primera generación de teléfonos en 2007.
Limitantes para los adinerados
De hecho en el libro Screen Schooled, Clement y Miles aseguran que los padres de familia de la socialité californiana, saben de los poderes adictivos de la tecnología, por lo que en las clases altas de EUA, los padres restringen más la tecnología a sus hijos adolescentes.
A pesar que las escuelas donde van los hijos de los ricos como en Silicon Valley, usan tabletas y computadoras Macintosh, contrarrestan esas lecciones utilizando pizarrones con gises para dar algunas clases.
Fuente: culturacolectiva.com