Está diseñado para acomodar a 54 personas en 27,95 m² y durante 48 horas en una situación de emergencia
En el mismo día que Vladímir Putin ha ampliado la doctrina nuclear del Kremlin, el Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia anunció que iniciaba la producción en masa de refugios antiaéreos móviles que protegen contra una variedad de amenazas, incluidas las ondas de choque y la radiación de una explosión nuclear.
Los refugios KUB-M, que diseñó y produce el Instituto Panruso de Investigación para la Defensa Civil y las Situaciones de Emergencia, están disponibles en Rusia desde 2017, pero hasta ahora no se había considerado escalar la producción. Cada uno de ellos tiene un coste aproximado de 360.000 euros y está compuesto por 2 contenedores intermodales estándar de 12 metros de largo: uno con espacio para albergar, supuestamente, a 54 personas en solo 27,95 m², y el segundo es una unidad técnica que contiene baños, unidades de filtración y un generador de energía diésel que le confiere una autonomía de 48 horas. Ambos contenedores son herméticos.
‘KUB-M proporciona protección durante 48 horas contra la onda de choque del aire y la radiación luminosa de una explosión nuclear; la penetración de radiaciones y la contaminación radiactiva de la zona; los efectos altamente explosivos y de fragmentación de las armas convencionales; caída de escombros de estructuras de edificios; productos químicos peligrosos; incendios’, señaló el instituto en una nota de prensa del año pasado sobre el refugio.
Cada refugio tiene un periodo de fabricación de 3 meses, puede transportarse por carretera o ferrocarril, y su capacidad puede ampliarse añadiendo nuevos módulos.
Para que ofrezca protección contra las ondas de choque y la radiación de una explosión nuclear, el KUB-M debe protegerse con bloques de hormigón de 400 x 600 mm, con un espacio de 10 cm relleno de arena.
En las fotos publicadas por los medios rusos, se pueden ver refugios KUB-M, en teoría finalizados, pero solo parcialmente cubiertos por los bloques de hormigón. Esto podría ser para que se aprecie el contenedor en las imágenes, pero la puerta de entrada no puede bloquearse con hormigón por razones obvias,lo que plantea dudas sobre su efectividad para detener los efectos de una explosión nuclear.
Curiosamente, los KUB-M no han podido obtener la consideración legal de refugios hasta mayo de este año. Hasta entonces, la legislación rusa solo reconocía como refugios a objetos estacionarios, pero el Ministerio de Situaciones de Emergencia impulsó los cambios legislativos para incluir también a estas estructuras modulares.
Fuente: larazon.es