El autómata, capaz de expresar emociones, ha sido diseñado para el cuidado de ancianos. Este innovador avance busca brindar atención empática y personalizada a la población mayor
China ha dado un paso significativo en el desarrollo de robots humanoides con la creación de Guanghua No. 1, una máquina capaz de expresar emociones humanas. Este avance fue presentado por la Universidad de Fudan durante la Conferencia Mundial sobre Inteligencia Artificial 2024 en Shanghái, el autómata destacó por su capacidad para mostrar expresiones faciales y captar los sentimientos de los usuarios.
Guanghua No. 1, que mide 1,65 metros de altura y pesa 62 kilogramos, está equipado con 45 articulaciones inteligentes que le permiten moverse de manera fluida y mantener una postura erguida. Su tecnología interna incluye un sofisticado modelo cerebral generativo jerárquico y corpóreo, lo que le permite realizar movimientos precisos de manos y caminar de manera estable.
Una de las características más innovadoras de del robot es su pantalla facial, diseñada para expresar una variedad de emociones como felicidad, tristeza, enfado y alegría. Este desarrollo no solo tiene una finalidad técnica, sino que responde a una necesidad social específica: el cuidado de la población china de edad avanzada.
Gan Zhongxue, vicedecano de la Academia de Ingeniería y Tecnología de la Universidad de Fudan, explicó que la investigación de mercado que realizaron reveló que el cuidado de ancianos y los servicios de salud son áreas prioritarias para la aplicación de robots humanoides. El objetivo es crear un compañero de salud capaz de brindar atención personalizada y empática a los ancianos.
Zhongxue enfatizó que el desarrollo del autómata se centra en abordar las necesidades emocionales de las personas mayores, ofreciendo cuidados con inteligencia emocional que superan la asistencia mecánica tradicional. “Los cuidados genuinos requieren inteligencia emocional”, afirmó Zhongxue, subrayando la importancia de la calidez y la empatía en la atención a los ancianos.
El diseño de Guanghua No. 1 incorpora un mecanismo de motivación y recompensa de dopamina inspirado en el cerebro humano, utilizando algoritmos de incentivos coordinados para generar percepciones y comportamientos similares a los de una persona. Este enfoque permite que el robot interactúe de manera más humana y ofrezca un nivel de atención comparable al de un familiar.
Fuente: elcomercio.pe