Un grupo de investigadores del Real Jardín Botánico de Kew, en Londres, ha logrado identificar sobre el terreno la secuencia genética de un organismo a través de un innovador dispositivo portátil, de acuerdo expone un artículo publicado este miércoles en la revista Scientific Reports.
Durante los últimos cuarenta años, detallar la secuencia genética de los organismos ha revolucionado el mundo científico, pero ha sido una operación que siempre se ha desarrollado en los laboratorios.
Hasta ahora, con el método tradicional, los investigadores tardaban meses en completar las secuencias desde el campo de trabajo hasta dar con el resultado final.
Uno de los autores del estudio, Joe Parker, señaló que «esta investigación prueba cómo se puede leer rápidamente la secuencia de ADN de los organismos, utilizando el mínimo equipamiento». «A pesar de los años de investigación taxonómica, todavía no es sencillo trabajar para determinar a qué especie pertenece una planta sólo con mirarla», añadió el experto.
En esta investigación, los científicos han usado un dispositivo portátil capaz de determinar el ADN en cualquier campo de estudio, el MinION, de la compañía británica Oxford Nanopore Technologies.
A través de este aparato, analizaron la especie biológica de las plantas del Parque Nacional de Snowdonia, en el noroeste de Gales.
El dispositivo portátil, que tiene una forma similar a un USB, se creó en 2015 y ya ha sido utilizado en la Antártida y en la Estación Internacional Espacial (EEI).
Uno de los grandes éxitos del hallazgo ha sido la identificación de dos flores blancas, Arabidopsis thaliana y Arabidopsis lyrata, que se consiguió a través del análisis de partes aleatorias de las plantas y comparándolo con referencias genéticas anteriores.
Alexander Papadopulos, otro de los autores de la indagación, apuntó que «precisar la identificación de las especies es esencial para la investigación evolutiva y ecológica contra los crímenes de la fauna salvaje y también para controlar especies amenazadas».
Otro de los usos útiles de este estudio es que se puede montar una secuencia genética como referencia para entender la evolución de las especies.
Fuente: EFE