El gigante de la tecnología no tiene planeado dar acceso a los usuarios, ya que hay algunos conflictos que se deben resolver
La aparición de ChatGPT ha sido una de las sensaciones de estos últimos meses. Esta nueva inteligencia artificial, desarrollada por OpenAI, ha conquistado a millones de usuarios gracias a su asombroso poder para poder mantener conversaciones, crear códigos o resolver dilemas morales. Y Google ya tiene preparada la IA que puede arrebatarle parte del protagonismo a ChatGPT.
El gigante tecnológico, tal y como ha recogido Tech Crunch, ha publicado un nuevo artículo sobre un modelo de texto que puede generar música de alta calidad de cualquier género a partir de una breve descripción textual. Google ha bautizado su nueva inteligencia artificial como MusicLM.
Música de alta fidelidad a partir de descripciones de texto
Esta herramienta de creación musical, según ha explicado Google, está compuesta por SoundStream, W2v-BERT y MuLan, que se organizan en lo que denominan una tarea de entrenamiento jerárquico secuencia a secuencia. Y los resultados que se han conseguido con MusicLM son realmente buenos.
La compañía ha asegurado que es suficiente una pequeña explicación para obtener un buen resultado. Es suficiente con pedirle «una relajante melodía de violín acompañada de un riff de guitarra distorsionado» para que MusicLM empiece a generar música «a 24 kHz que se mantiene constante durante varios minutos».
También se le puede pedir que transforme el dolor del Guernica de Pablo Picasso en una melodía, que cree una pieza de piano tocada por un novato, o algo que vaya bien con una discoteca de los años 50. Y lo hará con mucha precisión. Pero eso no es todo. MusicLM incluso puede «transformar melodías silbadas y tarareadas según el estilo descrito en un pie de texto».
Otras herramientas similares como Riffusion, AudioML, Jukebox o Dance Diffusion ya habían empezado a explorar este territorio, pero se quedaron a medias por tener varias limitaciones a la hora de crear piezas musicales de cierta complejidad. En este sentido, los desarrolladores han garantizado que la nueva IA «supera a los sistemas anteriores tanto en calidad de audio como en adherencia a la descripción textual». Aunque, como han reconocido desde Google, está lejos de ser una inteligencia artificial perfecta.
Plantea numerosos problemas éticos
Para llegar a estos resultados, la inteligencia artificial se ha sometido a un entrenamiento con un archivo de 2.80.000 horas de música para aprender a generar canciones coherentes para descripciones de «complejidad significativa».
Por lo tanto, la herramienta que Google ha presentado recientemente podría llegar a revolucionar la industria musical. Podría, en condicional. Porque no lo hará. Al menos de momento y si Google no cambia de opinión. «No tenemos planes de publicar modelos en este momento», afirma el documento que ha publicado Google. La compañía ha alegado que existe el riesgo de plagio de contenidos creativos, de apropiación cultural o tergiversación.
Durante un ensayo, los investigadores de Google detectaron que aproximadamente el 1% de la música generada por MusicLM era una imitación exacta de las canciones con las que se había entrenado. Puede parecer que es porcentaje no sea demasiado, pero es un nivel lo suficientemente alto como para que prefieran guardar la IA hasta que esté completamente preparada.
La precaución de Google con MusicLM contrasta con la ligereza que otras empresas han lanzado sus IA, incluso pese a tener fallos, estar inacabadas o suponer algún tipo de problema. De esto ya se ha quejado Meta recientemente, concretamente de ChatGPT y a través de Yann LeCun, vicepresidente y científico fefe de Inteligencia Artificial de la compañía que dirige Mark Zuckerberg. Según LeCun, ChatGPT no es un ningún avance porque tiene demasiado fallos, además de vampirizar la información que se encuentra por Internet.
A pesar de no tener ni planeado el lanzamiento de MusicLM, Google sí ha puesto a disposición de los usuarios más de 5.000 combinaciones de música y texto para que puedan apreciar el poder de la inteligencia artificial. Y solamente aquellos desarrolladores de otros modelos musicales similares podrán utilizar estos pares para poder entrenar y evaluar a sus respectivas herramientas, aunque no podrán publicar las piezas musicales obtenidas.
Fuente: lavanguardia.com