Científicos de China desarrollan un interesante prototipo que convierte una mochila ordinaria equipada con amortiguadores en un generador eléctrico fácil de transportar y con capacidad para alimentar luces LED y otros dispositivos.
La creatividad salpica muchas de las innovaciones surgidas en torno a la generación de electricidad, y es que aprovechando elementos cotidianos o dotándolos de una doble función es posible obtener energía. Buenos ejemplos de ello son desde las ventanas solares a paneles de bolsillo flexibles y en miniatura, camisetas capaces de producir electricidad, dispositivos que extraen energía de las sombras o gadgets que sacan electricidad de tus rodillas. Y ahora, una mochila que podría cargar tus dispositivos.
La mochila, creada por investigadores de la Universidad de Tsinghua en China, se encuentra suspendida sobre rieles deslizantes que le permiten moverse hacia arriba y hacia abajo con un par de cuerdas de goma en un sistema de poleas. De esta manera, actúa de forma similar a la suspensión de un automóvil para reducir el impacto de la mochila mientras camina. Esto reduce la cantidad de fuerza generada por el contenido del paquete moviéndose en un 21%.
“Cuando caminamos, el centro de masa del cuerpo se mueve hacia arriba y hacia abajo”, dice Jia Cheng, principal responsable del desarrollo del prototipo. Una mochila ordinaria se mueve con este centro de masa, pero el sistema de poleas cancela ese movimiento y luego usa el movimiento relativo entre la bolsa y el cuerpo para alimentar un nanogenerador triboeléctrico (TENG) que convierte la energía mecánica en electricidad.
Cuando alguien camina con esta mochila puesta, el TENG convierte el 14% del movimiento de la bolsa en energía eléctrica, produciendo 118 microjulios. El equipo pudo usar esto para alimentar pequeños dispositivos como diodos emisores de luz, una luz LED fluorescente o un reloj eléctrico.
“Este es un trabajo muy interesante para dispositivos electrónicos sin poder y un paso adelante hacia la electrónica ecológica”, dice Chan Hwang See de la Universidad Napier de Edimburgo, Reino Unido. Pueden todavía realizarse mejoras como aligerar el peso del sistema, ya que la versión actual pesa alrededor de 3 kilogramos, lo que le resta comodidad. Chang revela que será factible reducir el peso hasta solamente ser de un kilo, así como mejorar el rendimiento de la densidad de potencia.
Fuente: ticbeat.com