“Desconecta tus dispositivos Alexa ahora mismo, te están hackeando”. Con esta frase alertó a Danielle un amigo de su marido de que su altavoz inteligente de Amazon no estaba funcionando bien. El hombre la telefoneó porque había recibido un mensaje con una grabación de una conversación privada que Danielle había mantenido con su pareja. Al principio, según le contó ella misma al canal de Seattle KIRO-TV, pensó que se trataba de una broma. Pero cuando él le dijo que sabía que habían estado hablando sobre “pisos de madera”, se quedó atónita.
El altavoz Echo de Amazon, con su asistente Alexa, había grabado una conversación privada y se la había enviado a un número aleatorio de la lista de contactos. “Me sentí invadida. Es una invasión de privacidad total. Inmediatamente, dije: ‘Nunca volveré a enchufar ese dispositivo porque no puedo confiar en él”, le contó Danielle a KIRO-TV. La afectada tenía instalados varios dispositivos Echo en todas las habitaciones de su casa en Portland (Oregon). Cuando le ocurrió, empezó a plantearse los riesgos que puede presentar tener un dispositivo en el hogar escuchando las 24 horas del día.
Un trabajador de atención al cliente de Amazon confirmó a Danielle que Alexa había enviado el audio a uno de sus contactos, según afirma el medio especializado en tecnología The Verge. Pese a que el empleado se disculpó, no le explicó a qué se debía el error. Amazon, que siempre ha defendido que sus altavoces no graban durante todo el día, se ha visto obligado este jueves a dar explicaciones al respecto: “Echo se activó debido a una palabra en una conversación de fondo que sonaba como ‘Alexa’. Luego, la conversación siguiente la escuchó como una petición de ‘enviar mensaje’. En ese momento, Alexa dijo en voz alta ‘¿A quién?’. El dispositivo interpretó la conversación de fondo como un nombre en la lista de contactos del cliente. Alexa luego preguntó en voz alta: ‘(nombre de contacto), ¿No?’ Alexa interpretó la conversación de fondo como ‘correcta”.
Teniendo en cuenta la improbabilidad de que todos estos hechos ocurran, la compañía señaló que están buscando soluciones: “Por improbable que sea esta serie de eventos, estamos evaluando opciones para hacer que este caso sea aún menos probable”.
Varios usuarios de Alexa ya denunciaron el comportamiento extraño del altavoz inteligente en marzo de 2018. El asistente confundía palabras y frases comunes con el comando “Alexa, laugh” y se reía de forma espontánea. Mientras que algunos usuarios explicaron que los estallidos se producían de forma completamente espontánea, otros afirmaron que tenían lugar cuando le pedían al altavoz que encendiera la luz. “Echo de Amazon solo en la cocina a oscuras, de repente emerge una repentina y espeluznante risa y asusta a los dueños”, decía una usuaria en Twitter.
Fuente: elpais.com