Los drones funcionarán para la entrega de suministros médicos en Australia. Los australianos de zonas remotas del país podrán recibir suministros vitales y de forma urgente, siendo más barato, rápido y eficaz que el uso de helicópteros.
El proyecto, bautizado como Angel Drone, deberá iniciar el servicio en zonas rurales de Nueva Gales del Sur a finales de este año. «Elegimos ese nombre porque creemos que a pesar de que los aviones no tripulados se han utilizado para industrias como la minería o la guerra, ya es hora de que se utilice la tecnología para la mejora de la humanidad y el bien común», explica el neorocirujano que dirige el proyecto, Carlos Teo.
El proyecto, según recoge la cadena local ABC, cuenta con el apoyo del Gobierno Federal y la compañía asegura que Australia «lidera así el camino en el uso comercial de la tecnología de drones». «Fuimos los primeros en regular los aviones no tripulados en el año 2002 y estamos especie de líder en el mundo cuando se trata de temas de regulación y seguridad», agrega Teo.
Los usos potenciales para Angel Drone son muy amplios, especialmente en zonas en las que es difícil el acceso y donde es complicado encontrar una atención médica rápida, prescindiendo así del uso de helicópteros para enviar antídotos o remedios y haciendo que el transporte sea más seguro, más rápido y más barato mediante los aviones no tripulados.
Los drones también se han convertido en aliados de los hospitales y servicios médicos: la empresa Zipline anunció a principios de año su colaboración con el gobierno de Ruanda y ya trabaja con quince drones capaces de volar 150 kilómetros y llevar un kilo y medio de sangre a los que lo soliciten a través de un mensaje de texto.
Fuente: innovaticias.com