Quizá no sepas que, además de películas, Disney tiene un departamento de investigación que habitualmente colabora con entidades académicas de gran prestigio, como la Carnegie Mellon University y el Swiss Federal Institute of Technology (ETH) de Zurich.
Su última genialidad, por ejemplo, consiste en un gadget que permite cargar el móvil, el portátil y cualquier otro dispositivo sin conectarlos a ningún cable, mientras nos movemos por una habitación.
Así, esta carga sin cables ideada por Disney es segura para los humanos y tampoco afecta a los muebles y a la decoración de la habitación. El único requisito para poder usarlo es que las paredes, el suelo y el techo de la habitación deben integrar paneles de aluminio. En el centro de la estancia se coloca una tubería de cobre con un cableado especial, del suelo al techo. De esta forma la corriente eléctrica desciende al suelo, atraviesa las paredes y vuelve a ascender. Y esa electricidad girando en bucle crea un campo electromagnético que permite cargar simultáneamente hasta 10 dispositivos, como muestra este video.
No es la única ocurrencia con chispa salida de las entrañas de Disney Research. Sus investigadores también están decididos a usar la luz visible para que los juguetes de los pequeños se comuniquen dentro de lo que se conoce como el ‘Internet de las cosas’. Y todo eso sin necesidad de grandes inversiones, ya que bastaría con usar las bombillas LED desarrolladas por Disney para recabar datos de, por ejemplo, cuánto juegan los niños con los juguetes, o conectar los juguetes a internet, sin depender de las redes WiFi.
En el futuro, además, podría extrapolarse a los coches que circulan por la carretera, que como en la película ‘Cars’ podrían hablar unos con otros e ‘informarse’ a través de sus faros cuando se cruzan del estado de las carreteras, los atascos o los accidentes.
Los de Disney se han atrevido incluso con la robótica. Uno de sus diseños estrella consiste en un robot autónomo que brinca con una sola pata, como Tigger, el felino saltarín amigo de Winnie the Pooh. Y también han engendrado un robot llamado Vertigo que asciende por las paredes como un gecko, desafiando a la gravedad.
Otros inventos chulos de Disney son bastante más lúdicos. Es el caso del Beachbot, un robot que arrastra una especie de alfileres por la arena para dibujar cualquier personaje en la playa automáticamente. O del sistema que permite convertir cualquier modelo 3D en un globo inflable que reproduce cada curva y recoveco de la figura sin deformarse durante el proceso.
A esto se le suma que los reyes del cine de animación han desarrollado un sistema que transmite sonidos a través del cuerpo. El usuario graba un mensaje inaudible, que se trasfiere a través de señales eléctricas al cuerpo de la persona que sujeta el micrófono. Si el emisor le toca a otra persona la oreja con su dedo, el elegido será el único en escuchar el mensaje.
Lo han bautizado como Ishin-Den-Shin, expresión japonesa que significa: «lo que piensa la mente, lo transmite el corazón». Ahí es nada.
Fuente: tecnoxplora.com