El invento se está probando comercialmente en el monte Tai, China. Gracias a él, muchas más personas de lo habitual están consiguiendo subir sus 7.200 escalones
El turismo está experimentando una auténtica revolución gracias a la integración de nuevas tecnologías que facilitan el acceso a lugares inhóspitos. En el monte Tai, situado en la provincia de Shandong, China, se ha puesto en marcha una iniciativa innovadora que permite a los turistas alquilar exoesqueletos robóticos para ascender a la cima sin apenas esfuerzo.
Esta imponente montaña, que se eleva a 1.525 metros sobre el nivel del mar y cuenta con más de 7.000 escalones, se ha convertido en un desafío para los viajeros. Para muchos, la ascensión concluye con un abandono a medio camino. En ocasiones, incluso tienen que ser evacuados por los equipos de emergencia, como puede verse en el siguiente vídeo.
Con el objetivo de facilitar este recorrido, Kenqin Technology, una empresa especializada en robótica, ha creado piernas robóticas asistidas por inteligencia artificial. Este exoesqueleto, cuyo funcionamiento es tan sencillo como efectivo, permite a los turistas recorrer el camino con facilidad, aliviando el esfuerzo físico necesario para subir. Basta con ajustarlo a las caderas y a los muslos para que, gracias a un motor eléctrico y a un algoritmo de IA, proporcione impulso al usuario en cada paso.
Los turistas están encantados
Con un peso de apenas 1,8 kilos y una batería que dura alrededor de cinco horas, el dispositivo ha sido diseñado para garantizar que los turistas puedan completar el recorrido sin dificultades. Según la agencia de noticias Xinhua, cientos de personas han querido probarlo ya. Además, su precio es extraordinariamente barato: quienes lo deseen pueden alquilar el exoesqueleto por 70 yuanes, que al cambio son menos de 10 euros. No es de extrañar que esta primera prueba haya sido catalogada ya como un éxito rotundo.
La experiencia está llevando a otros muchos destinos turísticos a explorar la posibilidad de ofrecer este tipo de exoesqueletos a sus visitantes. Además, no solo echa una mano a quienes por falta de condición física no pueden o no quieren afrontar retos de estas características. También abre un mundo nuevo de posibilidades para las personas con movilidad reducida, quienes podrían acceder a lugares imposibles para ellos hasta ahora.
Fuente: elconfidencial.com