Senadoras y senadores realizaron un intenso trabajo legislativo para adecuar el marco jurídico a las demandas sociales.
Durante la LXII y LXIII Legislaturas, la Cámara de Senadores realizó un intenso trabajo legislativo para adecuar el marco jurídico a las demandas de la sociedad y a la realidad política, social, económica y cultural de nuestro país.
En los últimos seis años, el Senado de la República fue protagonista de uno de los períodos de cambio más importantes de México, que implicó una transformación estructural para elevar la productividad, fomentar el crecimiento económico, ampliar los derechos de los mexicanos y afianzar nuestro régimen democrático y de libertades.
En un balance sobre el cierre de estas dos legislaturas, el presidente de la Mesa Directiva, Ernesto Cordero Arroyo, destacó que en 437 sesiones se aprobaron 31 reformas constitucionales y 75 nuevas leyes.
Se concretó la legislación para fortalecer el sistema educativo nacional y elevar la calidad de la enseñanza; modernizar el sector energético e impulsar a Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad como empresas productivas del Estado; así como transformar el sistema político-electoral.
En materia económica, se consolidó el marco legal para regular las relaciones económicas, prohibir los monopolios, asegurar la competencia y ampliar las opciones en los servicios de telecomunicaciones.
La Cámara de Senadores trabajó con un modelo de Parlamento Abierto, que implicó un proceso de diálogo, análisis y debate con organizaciones sociales, académicos, funcionarios, representantes de la sociedad civil y expertos.
De esta manera, sentó las bases para crear el nuevo modelo de Justicia Penal Acusatorio y el Sistema Nacional Anticorrupción; además, se avalaron las leyes para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas en el ejercicio de los recursos públicos; y asegurar el manejo responsable de las finanzas de estados y municipios.
En materia de seguridad, se establecieron los criterios para dar certeza jurídica a las Fuerzas Armadas para atender riesgos y amenazas, combatir a la delincuencia organizada, erradicar la desaparición forzada de personas y la tortura, así como garantizar la atención y derechos humanos de víctimas de los delitos.
El presidente de la Mesa Directiva también subrayó que se realizaron 849 reformas para mejorar la regulación relativa a la equidad y género, grupos vulnerables, trabajo, medio ambiente, seguridad social, pueblos y comunidades indígenas, educación y cultura, justicia y salud.
Dijo que se realizaron 519 nombramientos para ocupar importantes cargos de la vida pública del país; que se ratificaron 1031 grados militares y 857 grados navales; y se concedió a seis grandes mexicanos la Medalla Belisario Domínguez: Ernesto de la Peña Muñoz, Manuel Gómez Morín, Eraclio Zepeda Ramos, Alberto Bailléres González, Gonzalo Miguel Rivas Cámara y Julia Carabias Lillo.
A fin de rendir un homenaje a mexicanas destacadas en la lucha social, cultural, política y económica en favor de los derechos humanos y la igualdad de las mujeres, el Senado instauró el Reconocimiento Elvia Carrillo Puerto, que fue entregado a María Marcela Lagarde y de los Ríos, Carmen Moreno Toscano, Rosario Marín, Gloria Ramírez Hernández y María Elena Chapa.
La vocación internacional del Senado se consolidó durante estos seis años al aprobar 133 instrumentos internacionales y el despliegue de una intensa labor para proteger la soberanía nacional y defender a nuestros connacionales, principalmente en el momento más crítico de la relación con los Estados Unidos.
Se ratificó el nombramiento de 175 embajadores, cónsules generales y representantes permanentes; y se recibió a 10 Jefes de Estado, 3 Jefes de Gobierno, 49 Presidentes de Parlamento, 12 titulares de organismos internacionales, así como a diversos representantes de gobiernos locales extranjeros.
Un grupo plural de senadores da seguimiento puntual a las rondas de negociación de la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y el Pleno aprobó el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico, que permitirá consolidar la presencia de México en el mundo y promover la innovación de sus sectores productivos.
La extensa labor de diplomacia parlamentaria, agregó Cordero, nos permitió recibir el encuentro de los presidentes de los congresos de las 20 economías más importantes del mundo y que diversos senadores mexicanos encabezarán la Unión Interparlamentaria, el Foro “Parlamentarios por las Américas”, la Confederación Parlamentaria de las Américas, el Parlatino y la Comisión de Seguimiento Parlamentario de la Alianza del Pacífico.