Científicos descubrieron un nuevo mecanismo que permite al sistema inmunológico, eliminar las células cancerosas invisibles para las células T asesinas del sistema inmunitario que se encargan de luchar contra los cánceres. Estos hallazgos abren nuevas posibilidades para el desarrollo de inmunoterapias mejoradas contra la enfermedad.
Las inmunoterapias modernas refuerzan las propias defensas del cuerpo contra el cáncer. Activan las células T asesinas del sistema inmunitario que pueden reconocer y destruir, específicamente, las células cancerosas. Sin embargo, en muchos pacientes, las células cancerosas se adaptan y se vuelven invisibles para las células T asesinas, por lo que el tratamiento ya no es efectivo.
Un equipo interdisciplinario de investigadores de Magdeburgo, Alemania, buscaban estrategias para atacar a las células cancerosas que son invisibles para las células T asesinas y ya ha logrado realizarlo al toparse con las habilidades especiales de las llamadas células T auxiliares.
En este sentido, los investigadores observaron que un pequeño número de células T auxiliares puede erradicar cánceres avanzados tan eficazmente como un número mucho mayor de células T asesinas. También pudieron eliminar las células cancerosas que se habían vuelto invisibles para las células T asesinas.
El uso de técnicas de microscopía de vanguardia para estudiar las células inmunes en el tejido canceroso vivo reveló que las células T auxiliares se comportan de manera fundamentalmente diferente a las células T asesinas.
“Las células T asesinas penetran en los tejidos cancerosos e interactúan directamente con las células cancerosas, mientras que las células T auxiliares se encuentran principalmente en el borde de los tejidos cancerosos, donde intercambian señales con otras células inmunes”, explicó Andreas Müller, profesor del Instituto de Inmunología Molecular y Clínica de la Universidad de Magdeburgo.
Investigaciones adicionales revelaron que las células T auxiliares producen mediadores químicos que atraen células carroñeras del sistema inmunitario y las inducen a apoyar la destrucción de células cancerosas en su nombre. Juntos, estos dos tipos de células pueden combatir eficazmente las infecciones bacterianas y virales. Su cooperación también se puede aprovechar para movilizar todo el arsenal de defensa inmunológica contra las células cancerosas.
Fuente: Sputnik