Si tienes más de 30 o 35 años de edad, es probable que tu currículo sea rechazado en una empresa de tecnología en China porque se te considera demasiado mayor.
Tres cuartas partes de los trabajadores en el ámbito de la tecnología ya son menores de 30 años en China debido a esta criba de los responsables de recursos humanos.
Familia
La idea de que subyace a esta discriminación es que los mayores de esta edad ya suelen estar casados y tienen una familia que cuidar, así que no van a esforzarse tanto como los jóvenes en el trabajo ni se implicarán en sus dinámicas, haciendo todas las horas extra que sea necesario.
El problema no solo reside en China: en marzo, IBM se enfrentó a acusaciones de discriminación persistente por edad en los Estados Unidos. Google ha estado litigando contra una demanda desde 2015 por este motivo.
La idealización de la juventud también está en el ADN de la industria tecnológica estadounidense. Steve Jobs, Bill Gates y Mark Zuckerberg abandonaron la universidad para fundar Apple, Microsoft y Facebook, respectivamente, e impregnaron la cultura de sus compañías con una desconfianza por la autoridad y la edad avanzada. La mayor diferencia es que en China discriminar por edad es legal.
La presión sobre los trabajadores de más edad existe en todas las industrias de China, pero es particularmente grave en la tecnología, donde el frenesí por contratar jóvenes talentos revela el alcance del deseo del país de demostrar su valía como líder mundial.
China ha utilizado los avances tecnológicos para impulsar su economía durante décadas, pero el plan Made in China 2025 del presidente Xi Jinping ha revolucionado esta actividad. A medida que el poder político de Xi ha crecido, también lo ha hecho la urgencia de la industria para llevar a cabo su ambición: dominar el mundo en tecnologías avanzadas, incluidos los semiconductores y la inteligencia artificial.
La paradoja de todo esto es que la mayor parte de las empresas de tecnología en China han sido fundadas por personas que tenían más de 30 años, si bien es cierto que en la actualidad cada vez hay fundadas y dirigidas por menores de esa edad.
Ahora que estamos tan preocupados por la discriminación laboral de las mujeres o la brecha salarial, quizá deberíamos empezar a centrar el foco en la discriminación por edad que, además, involucra a ambos sexos. Es decir, a todas las personas.
Fuente: xatakaciencia.com