Después de haber sido postulado por el presidente Trump, James Frederick Bridenstin fue ratificado por el Senado de EE.UU. como director de la agencia espacial. Es el primer político elegido para un cargo público que accede a ese puesto.
“Yo diría que el clima está cambiando. Siempre ha cambiado. Hubo periodos de tiempo, mucho antes del motor de combustión interna, en los que la Tierra era mucho más cálida que hoy”.
Las palabras las pronunció James Bridenstin en 2016 en una entrevista que fue publicada en la revista Aerospace America y es una de las pruebas de su escepticismo frente al cambio climático. Su postura, ahora que acabó de ser nombrado nuevo director de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (Nasa), tiene inquieta a la comunidad científica.
Que el director de uno de los organismos de ciencia más importantes del planeta, que además tiene una línea de investigación sobre el calentamiento global, no reconozca la existencia de un fenómeno sobre el que hay suficiente evidencia, parece ser preocupante.
Bridenstin llega a su nuevo cargo luego de que la Nasa estuviera sin director durante 15 meses, el lapso más largo que ha durado sin un líder. Antes de ser postulado por el presidente Donald Trump, se desempeñaba como congresista del Partido Republicano. Tenía un puesto en la Cámara de Representantes, en el Comité de Ciencia, Espacio y Tecnología.
Graduado en Economía y Negocios, ex piloto de la Armada de EE.UU., excombatiente en las guerras de Irak y de Afganistán y ex director del Museo y Planetario del Aire y del Espacio de Tulsa, el nuevo director de la Nasa será el primer político elegido para un cargo público en acceder a ese puesto. Su elección en el Senado fue bastante apretada: 49 votos frente a 50. Algunos republicanos como Marco Rubio y Jeff Flake cambiaron este miércoles de posición luego de que meses atrás habían recomendado nombrar un científico con experiencia en ese cargo.
“Es un honor haber sido confirmado por el Senado de los Estados Unidos para servir como Administrador de la Nasa. Estoy sobrecogido por esta oportunidad, y agradezco al presidente Donald Trump y al vicepresidente Mike Pence por su confianza”, dijo Bridenstin cuando se enteró de su nombramiento.
Una de sus misiones será impulsar los propósitos de Trump de llegar de nuevo a la Luna, una idea que cambia los antiguos planes del pasado Gobierno. Obama se había centrado en explorar Marte.
Fuente: elespectador.com