Icono del sitio INVDES

Ciencia y vocaciones científicas en México

Educación, innovación y arte

En nuestro país existen científicos que han contribuido significativamente en el avance de la ciencia y tecnología en el mundo, como por ejemplo: Guillermo González Camarena inventó un sistema para transmitir televisión en color en 1940, Evangelina Villegas Moreno sus investigaciones lograron la mejora de la calidad nutricional de alimentos básicos, en particular del maíz. Luis Ernesto Miramontes Cárdenas contribuyó en la síntesis de la píldora anticonceptiva. Mario Molina, científico influyente en la comprensión de la salud de nuestro planeta, recibió el Premio Nobel de Química en 1995 por su trabajo en la química atmosférica y la protección de la capa de ozono. Filiberto Vázquez Dávila, desarrolló la tecnología para la tinta indeleble, Tessy María López Goerne, se le considera pionera en la nanomedicina catalítica que tiene impacto positivo en la medicina, Luis Enrique Velasco especialistas en robótica espacial, diseño el exitoso Rover Perseverance, un robot explorador de última generación que aterrizó en Marte en el 2021, Adolfo Patrón Luján creador de dos fórmulas exitosas Resistol 850 y Resistol 5000, Jorge Rivera Rovelo desarrolló un dispositivo que monitorea el ciclo de fertilidad de la mujer de forma natural y no invasiva, Rubén Domínguez Maldonado especialista en aprovechamiento de energías alternativas como solar y eólica en 2015 inventó su rotor eólico modular tipo Savonius helicoidal para zonas urbanas, estos diez científicos mexicanos por mencionar alguno, muestran parte del trabajo de la ciencia mexicana de 1940 a 2021.

Sin embargo cada día se requiere impulsar un mayor avance científico en nuestro país y no depender de los desarrollos de otros países, para lograrlo se requiere revisar varios aspectos: el primero es la inversión que México realiza en ciencia, tecnología e innovación, el cual en este año es de 0.16% del PIB , el más bajo desde 2008, cifra significativamente menor que el promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que se sitúa alrededor del 2.5%. Este escenario limita las aspiraciones de convertir a México en una potencia científica, aunque la presidenta de nuestro paìs su perfil es científico.

El segundo punto se requiere que la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti) impulse políticas y programas necesarios para hacer realidad el avance científico en México, como por ejemplo el apoyo a las vocaciones científicas, en nuestro país existe gran potencial científico en formación, me refiero a las generaciones de niños, niñas y jóvenes que actualmente se forman en escuelas, en sus hogares y en todos aquellos espacios dedicados al fomento de la educación, innovación y arte.

Todos ellos tienen la oportunidad de ser personas sobresalientes, aptos de realizar aportaciones a la solución de problemas que presenta el mundo actual, capaces de pasar de la imaginación a la innovación o sea no quedarse con ideas, sino aportar resultados tangibles que solucionen problemas, eso se logra implementando estrategias para aprovechar al máximo su talento, mediante el fomento de las vocaciones científicas desde temprana edad, lo que todavía en México representa un desafío y un reto la formación de los futuros investigadores y tecnólogos que nuestro país necesita, y que representan el impulso del desarrollo socioeconómico.

Existen esfuerzos nacionales y en los estados para el fomento de las vocaciones científicas, pero no son suficientes, algunos apoyados por la Secihti, otros por los gobiernos estatales, también por Organizaciones como IMCA IAP que este año realizará la 17va edición de Expogenios, el programa PAUTA de la UNAM, los veranos de investigación científica, entre otros. Algunos de los aspectos que condicionan el fomento a las vocaciones científicas son principalmente la falta de una cultura científica que influya en las decisiones de políticas y presupuestos, entonces gestionar la formación de la cultura científica e incrementar vocaciones científicas en niños, niñas y jóvenes son dos aspectos fundamentales e intrínsecamente ligados, para mejorar el nivel científico en México en los cuales debemos trabajar de manera urgente, si se quiere lograr un país innovador que resuelve sus debilidades y problemas.

Egresada de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Occidente en 1990, Maestría en Comunicación con mención honorífica por la Universidad Iberoamericana, Unidad Santa Fe en 2005, Especialista en Administración de proyectos por el ITAM en 2014. En 1983 inicia en medios de comunicación, en las estaciones de radio de Promomedios Mochis. En 1984 la SEP le expide el Certificado de Locutor categoría B. En 1992 ingresa a laborar a la Universidad de Occidente en los siguientes puestos: 1992-1998 Directora Fundadora de Radio UdeO y Coordinadora de los Centros Integrales de Comunicación. De abril de 1993 a abril de 2020 Profesora de carrera en la UAdeO Unidad Los Mochis en el Programa de Comunicación. De 1999 a 2004: Directora de Extensión y Vinculación, además de colaborar en los programas de incorporación de las tecnologías en el aula y coordinación en la instalación de los Centros de Tecnología Educativa. De enero de 2005 a julio de 2006 fue vicerrectora de operación institucional. Directora de Impulsora de la Cultura y de las Artes IAP desde su fundación en 2006 a la fecha, donde ha diseñado y puesto en marcha junto a un excelente equipo de trabajo los siguientes proyectos: 2007 Centro de Innovación y Educación, inicia operaciones mayo de 2008 2009 Trapiche Museo Interactivo, inicia operaciones abril de 2016 2013 Teatro Ingenio Los Mochis (colaboración en instalación) inicia operaciones diciembre 2016 2018 Centro de Innovación Cultural Mazatlán, inicia operaciones marzo 2021 Especialista en programas de educación, ciencia y tecnología, comunicación, telecomunicaciones, cultura, innovación, arte, responsabilidad social. Consejera de diferentes organizaciones de la sociedad civil y asesora en innovación, gestión, responsabilidad social e impulso a las vocaciones científicas en jóvenes y niños en instituciones, empresas y organizaciones sin fines de lucro.

Fuente: debate.com.mx

Salir de la versión móvil