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10,000 voluntarios ayudan a la NASA a encontrar ‘arañas’ en Marte

El terreno denominado araña o araneiform es una superficie agrietada por diversos canales que convergen en un mismo punto por lo que su apariencia es similar al cuerpo de éstos artrópodos. Según ha informado la NASA, el polo Sur de Marte está compuesto por losas de dióxido de carbono congelado, es decir hielo seco, que en su proceso de descongelación genera gas que tras acumularse ejerce presión sobre las capas de hielo quebrándolas y dando lugar a este fenómeno.

De este modo, la agencia espacial ha solicitado ayuda a cerca de 10.000 voluntarios para que examinen la superficie del planeta mediante las imágenes recopiladas por la cámara de Contexto (CTX) de reconocimiento de Marte y encuentren nuevos casos de erosión.

Asimismo, han explicado que la información recopilada se utilizará posteriormente para analizar con mayor profundidad su origen usando la cámara del Orbitador Científico de Imágenes de Alta Resolución (HiRISE), un sistema capaz de captar una menor superficie de suelo pero con mayor precisión que el CTX. «Es alentador ver a tantos ciudadanos del planeta Tierra volcados por ayudar a estudiar Marte», ha reconocido el investigador principal adjunto de HiRISE, Candice Hansen, del Instituto de Ciencia Planetaria. «Gracias al potente descubrimiento de las personas que están tomando fotografías de las características de Marte, se han recogido imágenes que con HiRISE no hubiera sido posible».

Este proyecto de participación ciudadana ha ayudado a los expertos a descubrir secretos ocultos del planeta rojo pero a su vez no ha parado de generar más preguntas. Algunas investigaciones han concluido en que los terrenos «araña» no están relacionados con las losas de hielo ni con el dióxido de carbono. Asimismo, las observaciones más recientes apuntan a que estas redes se encuentran principalmente en los suelos formados por la materia que generan los cráteres de impacto marcianos.

«Las mantas de material expulsado del cráter son erosionables y tal vez, en comparación con otras superficies, no sería necesario que la placa de hielo esté presente todo el tiempo, o de forma tan gruesa, para que se formen arañas » -ha explicado Hansen- «Tenemos nuevos descubrimientos y nuevas preguntas que responder, gracias a toda la ayuda de los voluntarios».

Los resultados de este primer año de investigaciones ciudadanas han sido expuestos este jueves por Meg Schwamb, del Planetario Científico en el Observatorio Gemini de Hawaii de la división de la Sociedad Astronómica Americana (AAS) de Ciencias Planetarias (DPS) y el 11º Planetario del Congreso Europeo de Ciencia (EPSC) de Pasadena, en California.

Fuente: El Mundo

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