Los monos aulladores, también conocidos como saraguatos, es una de las especies más imponentes de las selvas mexicanas. Durante lo que va del mes de mayo, autoridades informaron sobre la muerte de diversos ejemplares de esta especie en las zonas de Chiapas y Tabasco. Organizaciones sugieren que la posible causa de la muerte de los primates se debe a las condiciones climáticas de calor que se viven en el territorio nacional. Sin embargo, los tres niveles de gobierno coordinan esfuerzos para investigar la muerte de estos animales.
Hasta este lunes, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó sobre los decesos de monos registrados hasta ahora. Según los datos, el 4 de mayo algunos monos cayeron de los árboles en un predio en Cunduacán, Tabasco. Por otra parte, derivado de los incendios que tuvieron lugar entre el 6 y el 12 de mayo en una zona de conservación en el mismo estado se identificaron ejemplares adultos muertos. Igualmente, el 13 de mayo en Cunduacán se reportó un área quemada con monos muertos y vivos. También se encontraron ejemplares muertos en sitios que no habían sido afectados por el incendio.
El 17 de mayo se encontró un mono agonizante que, a pesar de los primeros auxilios, el ejemplar no logró sobrevivir. Éste fue trasladado a la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) para realizarle análisis.
Pero, ¿cómo es y qué se sabe del mono aullador saraguato?
El mono aullador o saraguato (Alouatta palliata mexicana) se considera el mono más grande y corpulento de América. Tiene el pelo largo, duro y abundante, su cabeza es grande en comparación al cuerpo, tiene su cara desnuda con el hocico chato, fosas nasales amplias, redondas y planas; y su mandíbula es muy prominente con la boca grande, indica la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).
Su cuerpo es rechoncho, con vientre algo abultado en el abdomen. Sus brazos son largos y fuertes, y los utiliza para desplazarse de rama en rama utilizando también las piernas y la cola. Sus manos tienen cinco dedos sin el pulgar oponible. Tiene la cola larga y prensil, desnuda en la punta, capaz de soportar su propio peso, aunque no suele colgarse de ella.
Tiene pelaje de color café oscuro. En los costados y parte ventral tiene pelaje largo de color amarillo a dorado, a veces, blanco. En el mentón le crece pelo en forma de barba. La piel de su rostro es negra y sus ojos son café oscuro.
Para marcar territorio utiliza glándulas odoríferas tallando su garganta u orinando la zona. Sus fuertes rugidos utilizados en la comunicación pueden ser escuchados a varios kilómetros.
El macho es más grande que la hembra, en promedio, ambos sexos miden de 38 a 58 cm de cuerpo. En el caso de los machos, estos pesan entre 6 y 7 kg, mientras que las hembras entre 4 ó 5 kg.
Su cola mide de 52 a 67 cm. Sus dientes suman un total de 36 piezas. Los incisivos son pequeños, los molares adaptados a masticar hojas, y los caninos están más desarrollados en los machos.
¿Dónde habita el mono aullador?
Su hábitat se extendía, originalmente, desde el sureste del país, desde los bosques tropicales remanentes del centro y sureste de Veracruz, hacia el Istmo de Tehuantepec en Oaxaca y a la parte centro-oeste de b donde descendía en dirección sureste por el estado de Chiapas, abarcando también la parte sur de Campeche y el extremo sur de Quintana Roo. Actualmente vive en zonas fragmentadas de bosque húmedo. En algunas regiones puede ser que haya desaparecido de su distribución original.
Los árboles son importantísimos para el mono aullador, pues son la mayor parte de su fuente de alimento y de agua; y es donde vive dentro del bosque húmedo.
En México solía considerarse común e incluso abundante en algunos lugares de su restringido rango de distribución. Sin embargo, su hábitat está siendo sometido a una elevada tasa de deforestación por lo que sus poblaciones han disminuido.
En los últimos 50 años ha perdido el 90% de su hábitat y sólo para la década pasada se estimó por modelos matemáticos que para la especie había mil 352 individuos en Áreas Naturales Protegidas y 10 mil 249 fuera de ellas.
Importancia cultural del mono aullador
Los monos saraguatos al igual que otras especies carismáticas, es parte de la historia de las civilizaciones prehispánicas y aparece en sus manifestaciones culturales, desde leyendas tradicionales sobre sus orígenes, hasta las vasijas y utensilios de uso diario.
Para los mayas existía entre sus dioses principales K´u o Ch´u, el “dios de la Sacralidad”, quien curiosamente en varias lenguas mayas, significa divino, dios o sagrado, y por tanto esta deidad era la personificación misma de estos conceptos. Por otra parte, para los mayas había animales (llamados tonales) que según la fecha de nacimiento le corresponden a las personas, dándole propiedades especiales para un oficio; por ejemplo, el mono corresponde al animal tonal de un escribano.
En la antigua leyenda Náhuatl de los Cuatro Soles; durante la creación del segundo sol se produjeron unos vientos huracanados que asustaron a los hombres, al tratar de escapar los dioses los convirtieron en monos, y con esta forma treparon a los árboles donde se refugiaron. Al dios náhuatl que sopla los vientos que preceden a las lluvias se le llama Ehecátl-Quetzalcóatl y es representado con un mono.
Eran también para la cultura azteca un antiguo símbolo de alegría y además, los monos representaban uno de los días utilizados para el calendario adivinatorio tonalpohualli, tzolkin; y creían que nacer en uno de estos días le daba a la persona propiedades especiales.
En náhuatl, la palabra Ozomatli es utilizada para mono y también corresponde a uno de los días del antiguo calendario azteca. En maya al mono se le conoce como ma´ax.
Actualmente se conservan aún, algunos mitos y tradiciones relacionadas con los monos aulladores, que según dicen por sus aullidos, se pueden predecir lluvias o cambio de clima.
Fuente: unotv.com