Nueva evidencia de que los caballos producen de manera fiable más relinchos en situaciones anímicas favorables puede mejorar las prácticas de bienestar animal.
Evaluar las emociones positivas es importante para mejorar el bienestar animal, pero ha sido un desafío identificar indicadores confiables. Los marcadores fisiológicos a menudo dan resultados contradictorios, y muchas señales de comportamiento son ambiguas. En particular, pocos estudios han examinado indicadores acústicos de emociones positivas.
Informes anecdóticos han indicado que los caballos con frecuencia producen bufidos en situaciones positivas. Siguiendo con esta evidencia, Mathilde Stomp y sus colegas de la Universidad de Rennes (Francia) evaluaron la producción de relinchos en 48 caballos que vivían en condiciones restringidas (es decir, caballos de equitación que pasaban gran parte de su tiempo en establos individuales) o condiciones naturales (es decir, grupos de caballos siempre en pastos).
Los hallazgos, publicados en PLOS ONE, indican que la producción de relinchos se asoció significativamente con situaciones positivas y con un estado interno positivo, como lo indican las orejas colocadas hacia adelante o hacia los lados. Por ejemplo, los caballos de escuelas de equitación producían el doble de bufidos en el pasto que cuando estaban en establos. Además, los caballos que viven en condiciones naturales emitieron significativamente más relinchos que los caballos de escuela en contextos comparables. Tomados en conjunto, los hallazgos sugieren que los relinchos son indicadores confiables de las emociones positivas en los caballos.
Stomp señala: “El relincho, una señal no vocal producida por la expiración del aire a través de las fosas nasales, se asocia con contextos más positivos (en el pasto, mientras se alimenta) y estados (con las orejas en posición avanzada) en los caballos, y es menos frecuente en caballos que muestran un bienestar alterado. Estos resultados proporcionan una herramienta potencial importante, ya que los relinchos aparecen como un posible indicador confiable de emociones positivas que podrían ayudar a identificar situaciones apreciadas positivamente por los caballos”.
Fuente: europapress.es