Es la primera vez que se observa este tipo de terremoto ya que hasta ahora solo existían teorías sobre el mismo
Un grupo de científicos del Imperial College London han descubierto que en 2016 un terromoto ‘boomerang’ sacudió el fondo del océano Atlántico, según publica la revista Nature.
El nombre científico de este tipo de terremoto es “ruptura de supercizalla que se propaga hacia atrás”. Es la primera vez que se observa este tipo de fenómenos ya que hasta ahora solo existían teorías sobre el mismo.
El terromoto tuvo lugar en la zona de fractura de Romanche, que se encuentra cerca del ecuador, aproximadamente a medio camino entre la costa este de Brasil y la costa oeste de África.
En agosto de 2016 se produjo un terremoto de magnitud 7.1 que fue detectado por sismómetros submarinos de la zona, así como por por estaciones de monitoreo distantes.
Sin embargo, el análisis posterior de los datos de estos sismógrafos muestran que no fue un terremoto al uso. Primero, la ruptura se propagó hacia arriba y hacia el este en la dirección de un punto débil donde la zona de fractura se encuentra con la Cordillera del Atlántico Medio. Luego, en un cambio repentino, se produjo una inusual retropropagación hacia el oeste, con los temblores regresando al centro de la falla, y a velocidades muy aceleradas de hasta 6 kilómetros por segundo.
El equipo aún no sabe explicar porque se dio este giro en el terremoto pero creen que la primera fase profunda del terremoto liberó suficiente energía de fractura para iniciar la reversión de la ruptura en el terreno submarino menos profundo del oeste.
Detectar un terremoto como este en el mundo, en el medio del océano, es un evento único, de hecho es la primera vez que se detecta.
Fuente: 20minutos.es