Han descubierto una araña extraordinaria y no ha sido en Australia, para sorpresa de todos. Se llama Ceratogyrus attonitifer, vive en Angola y tiene una enorme protuberancia parecida a un cuerno sobre el cefalotórax.
La tarántula ha sido descrita formalmente por los entomólogos John M. Midgley y Ian Engelbrecht, quienes recogieron varios especímenes entre 2015 y 2016. Su nombre, C. attonitifer, deriva de la raíz latina attonit-, que refleja la sorpresa que se llevaron los investigadores ante el hallazgo.
“Ninguna otra araña en el mundo posee una protuberancia foveal similar”, escribieron en African Invertebrates. Existen otras tarántulas cornudas, conocidas coloquialmente como arañas babuino, pero tienen un cuerno pequeño y esclerotizado (a diferencia del suave y prolongado cuerno de la C. attonitifer que sale de su cefalotórax y descansa sobre su abdomen).
Su veneno no es peligroso para los humanos, pero la araña es bastante agresiva. Cada vez que los investigadores colocaban un objeto en sus madrigueras, corrían a atacarlo. Las hembras, por su parte, tienden a apropiarse de las madrigueras de otros en lugar de cavar la suya propia.
Si bien la C. attonitifer es una especie nueva para la ciencia, ya era conocida por las tribus locales, que la conocen como “chandachuly”. En Angola, la tarántula cornuda ha causado varias muertes por mordeduras infectadas, pero podrían haberse evitado con tratamiento médico. En general, es un país poco explorado por los científicos que esconde una inmensa fauna endémica de la que seguramente volvamos a oír en los próximos años.
Fuente: es.gizmodo.com