¿Qué impide que una abeja obrera se vuelva fértil y se convierta en una reina? Según científicos de la Universidad de Nanjing (China), esto se debe a una molécula en su alimentación, la cual impide que se desarrollen.
El equipo de expertos, encabezado por el investigador, asegura que las microRNA, unas moléculas reguladoras de las plantas, están muy presentes en el llamado pan de abejas, la mezcla de polen y miel que es la base fundamental de la dieta de las obreras.
Este alimento mantiene también inactivos los ovarios de las abejas obreras, señalan los científicos.
Los investigadores ya sabían desde hace tiempo que la dieta tiene un papel importante en el complejo proceso que determina si una larva se convierte en obrera o en reina, pues la primera clase solo se alimenta de jalea real durante sus primeros tres días de vida, antes de pasar a la dieta de pan de abeja.
Las reinas, sin embargo, se atiborran toda la vida de jalea real, una sustancia secretada por las glándulas hipofaríngeas de la cabeza de las abejas obreras jóvenes, conocidas como guardianas.
El pan de abeja contiene niveles mucho más altos de microRNA que la jalea real, por lo que Xi y su equipo decidieron investigar si estas moléculas, que regulan la expresión génica de las plantas, podrían afectar el desarrollo de las castas de las obreras.
Encontraron que las abejas criadas en laboratorio con pan de abeja se desarrollaron lentamente, y tenían un cuerpo y unos ovarios más pequeños que las larvas desarrolladas sin ese alimento.
Las microARN de las plantas también tuvieron un efecto similar en las larvas de la mosca de la fruta, agregaron los científicos.
El estudio demuestra que la historia de la formación de castas entre las abejas es más compleja que la idea tradicional, que atribuye todo a la jalea real.
«La regulación del desarrollo de las abejas por las microARN de las plantas muestra una adaptación evolutiva para el éxito de las colonias a través de la asociación entre dos especies», dijo Xi.
Fuente: El Comercio