A los miembros de la familia Dromiidae se les conoce por ser peludos y suaves, lo que les permite camuflar sus patas aún más de sus depredadores. No obstante, su método de protección más característico está relacionado con las esponjas de mar.
En la naturaleza, siempre hay especies que nos llaman la atención por alguna característica particular o porque se salen de la imagen prototipo que tenemos de ellas. Ese podría ser el caso de Lamarckdromia beagle, un cangrejo que coloca esponjas de mar sobre sus patas traseras para camuflarse de depredadores como pulpos y peces.
El nuevo crustáceo, perteneciente a la familia de los Dromiidae, ha sido descubierto en la costa sur de Australia Occidental y debe su nombre al barco de investigación de Charles Darwin, The Beagle. El animal solo ha sido avistado entre las zonas Albany y Cape Naturaliste, las mismas por las que navegó el navío del naturalista allá por 1836.
“No hemos estudiado su rol en el ecosistema, pero sabemos que corta y transporta pedazos de esponja viva, por lo que puede desempeñar un papel en la reproducción y la dispersión vegetativa”, cuenta a SINC Colin McLay, primer autor del estudio e investigador de la Universidad de Canterbury.
Descubriendo nuevos especímenes
Fue una familia, que reside en Australia Occidental, la que encontró un espécimen de Lamarckdromia beagle varado en la playa y decidió enviarlo al museo de Australia Occidental (WAM, por sus siglas en inglés) para que lo identificasen. Allí, un grupo de científicos reparó en que era una nueva especie al compararla con otras de la colección.
El nuevo crustáceo se ha descrito junto con otras especies nuevas en un artículo publicado en la revista Zootaxa, que detalla los 31 ejemplares de cangrejo esponja que se han encontrado hasta ahora en las aguas de Australia Occidental.
“Descubrir nuevas especies en esta zona no es algo inusual. La cantidad de organismos que no sabemos que tenemos en aguas australianas sigue siendo muy alta”, explica Hosie, Andrew Hosie, el otro autor del estudio, y experto del museo de WAM.
Unos crustáceos suaves y con estilo
A los miembros de la familia Dromiidae se les conoce por ser peludos y suaves, lo que les permitiría camuflar sus patas aún más de sus depredadores, según los autores. No obstante, su método de protección más característico está relacionado con las esponjas de mar.
“Los cangrejos la recortan con sus pinzas y la dejan crecer para darle la forma de su cuerpo y la usan como sombrero o manta protectora para mantenerse a salvo de depredadores. Además, muchas esponjas marinas son nocivas para otros animales, con lo que no hay muchos depredadores activos que estén interesados en masticarlas solo para llegar a un cangrejo”, comenta Hosie.
Las patas traseras de estos crustáceos están especialmente adaptadas para sostener sus sombreros protectores. De manera similar a cómo los cangrejos ermitaños usan caparazones para protegerse, las esponjas ayudan a los cangrejos Dromiidae a pasar desapercibidos.
Fuente: elespectador.com