De acuerdo con el pionero en la producción de proteínas de origen transgénico, también se debe insistir en la importancia que tienen para México y el planeta los cultivares transgénicos de tercera generación, desarrollados en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados por el doctor Luis Herrera Estrella
“Lamentable, falsa e irresponsablemente se siguen denostando y satanizando a los organismos transgénicos y sus productos sin sustento científico, como si fuera una tecnología dañina”, afirmó Francisco G. Bolívar Zapata, miembro de El Colegio Nacional, en la conferencia transmitida en vivo el 28 de septiembre a través de las plataformas digitales de la institución.
La sesión fue la tercera del ciclo Biotecnología moderna: organismos transgénicos y las nuevas variedades genéticamente editadas; la importancia para la sustentabilidad del planeta, la salud humana y de manera indirecta del efecto invernadero (responsable del cambio climático), de los cultivares transgénicos por dejar de usar en el campo los dañinos y contaminantes insecticidas químicos y en un futuro, los herbicidas químicos como el glifosato, coordinado por el bioquímico mexicano.
Bolívar Zapata recordó que los actuales cultivares transgénicos se utilizan ampliamente debido a que permiten producir alimento sano, porque no requieren los dañinos y contaminantes insecticidas químicos. Enfatizó que el libro Transgénicos. Grandes beneficios, ausencia de daños y mitos (2017), del que es coordinador, puede sustentar lo anterior a lo largo de nueve capítulos y con más de 2 mil referencias científicas y técnicas.
En palabras del biólogo molecular, en Estados Unidos más del 90% del maíz, la soya y el algodón son cultivares transgénicos, y se debe en gran medida a que permiten reducir el dióxido de carbono en la atmósfera, el mayor contaminante y responsable principal del cambio climático.
Agregó que, en 2019, el gobierno de Filipinas aceptó el uso del arroz transgénico conocido como dorado, que tiene entre sus ventajas nutricionales a un precursor de la vitamina D. “Los cultivares transgénicos coexisten en muchos países con los cultivares tradicionales y vegetales de la biodiversidad sin evidencia de daño. Se cuenta con decenas de publicaciones científicas que sustentan su inocuidad.”
El colegiado insistió en la urgente necesidad de contar con un espacio para presentar al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, la evidencia científica y técnica que se ha acumulado y utilizado con relación a los Organismos Genéticamente Modificados (OGM) y sus múltiples beneficios, “ya que la información de sus asesores sobre los transgénicos y sus productos es parcial, incompleta y, en algunos casos, falsa”.
De acuerdo con el pionero en la producción de proteínas de origen transgénico, también se debe insistir en la importancia que tienen para México y el planeta los cultivares transgénicos de tercera generación, desarrollados en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados por el doctor Luis Herrera Estrella. Se trata de un grupo de cultivo que evita el uso de insecticidas y herbicidas químicos como el glifosato, que se utiliza para controlar las malezas.
La resistencia a insectos de los cultivos de Herrera Estrella y su equipo de trabajo se basa en un control biológico y no químico, es decir crecen con fosfito como fertilizante y como fuente de fósforo en vez de fosfato. Las malezas no crecen en presencia de fosfito, ahí su efectividad.
Explicó que existen nuevas y poderosas técnicas para editar de manera precisa los genomas de cualquier organismo, conocidas como CRISPR-Cas9. “Estas metodologías utilizan la proteína endonucleasa Cas9 de origen bacteriano y otras proteínas de tipo nucleasa, que cortan el ADN de cualquier origen, las cuales han revolucionado el diseño de organismos transgénicos mejorados y superiores, de tercera y cuarta generación. Estas técnicas permiten inactivar, activar o modificar cualquier gen o región de ADN en el genoma de cualquier organismo vivo.”
Bolívar Zapata sostuvo que la caracterización científica de organismos transgénicos, incluyendo decenas de cultivares construidos por técnicas de ingeniería genética, indican que las plantas genéticamente modificadas son muy parecidas a las parentales, ya que sólo tienen uno o dos genes diferentes. “No hay evidencia de daño por el consumo de estas plantas transgénicas y sus productos, y los beneficios son importantes.”
Comentó que los organismos transgénicos se diseñan y construyen responsablemente a fin de generar nuevas propiedades, características importantes y precisas, en el organismo receptor proveniente de otro organismo vivo. “El propósito es atender demandas presentes y futuras de la humanidad y del medio ambiente. De esta manera ha sido posible diseñar y desarrollar mejores, más precisos, poderosos y avanzados sistemas biológicos.”
El colegiado recordó que, a pesar de que algunos grupos no aceptan esta verdad científica, otro de los beneficios de la biotecnología moderna son los medicamentos, actualmente existen más de cien medicamentos de origen transgénico en las farmacias. “En México, gracias a estos organismos también llamados recombinantes, tenemos medicinas contra enfermedades metabólicas, insulina humana, factor anticoagulante e interferones, que ayuda al sistema inmunitario.”
Afirmó que “los organismos transgénicos o recombinantes son seres vivos como nosotros los humanos que formamos parte de la naturaleza y que tenemos que cuidar. Los cultivares de este tipo, además de controlar las plagas y malezas, permiten incrementar la productividad de las plantas y las cosechas”.
Fuente: El Colegio Nacional