La piel humana alimenta dispositivos que emplean energía intracorporal: el método elimina la necesidad de baterías
Un revolucionario sistema permite cargar auriculares inalámbricos, pulseras de actividad física y otros dispositivos con el cuerpo, dejando atrás las limitaciones de las baterías: la nueva tecnología funciona transformando el cuerpo humano en un medio de suministro de energía, utilizando señales de RF (radiofrecuencia) para transmitir electricidad de forma inalámbrica a través de la piel. Podría cambiar el escenario actual de la electrónica de consumo.
Investigadores del Grupo de Interfaces del Futuro de la Universidad Carnegie Mellon, en Estados Unidos, han optimizado desarrollos tecnológicos previos para crear un nuevo sistema que aprovecha la energía corporal para alimentar y recargar pequeños dispositivos electrónicos. Además de la comodidad que supone suprimir el uso de baterías, el avance sería notable también en términos de gestión ambiental y ahorro energético.
Recolectando energía del cuerpo humano
Según informa Fastcompany.com, el sistema consiste en un transmisor y un receptor. El transmisor es una unidad que almacena la energía de RF (radiofrecuencia) captada desde la piel del usuario, integrándose en elementos existentes como un teléfono móvil, un reloj inteligente o un banco de energía portátil, que podrían colocarse en cualquier parte del cuerpo.
Al mismo tiempo, un receptor absorbe la energía de radiofrecuencia y la convierte en energía utilizable para operar otro dispositivo móvil, como auriculares, pulseras de actividad física o cualquier tipo de artefacto electrónico de baja potencia, ubicado en otra parte del cuerpo. El sistema se describe en un nuevo estudio, presentado en la conferencia UIST ’24.
Los especialistas demostraron que este sistema puede transmitir energía a través de distancias corporales significativas, por ejemplo de pies a cabeza, con la potencia suficiente como para alimentar microcontroladores, sensores y comunicaciones Bluetooth. Los científicos sostienen que la principal innovación es usar el cuerpo humano como un medio capacitivo para la transferencia de energía, evitando las ineficiencias de la recolección tradicional de energía de radiofrecuencia en el aire.
Un mejor aprovechamiento de la energía
Mientras estos enfoques previos desperdiciaban la mayor parte de la potencia transmitida, el nuevo sistema optimiza la transferencia de energía a través del cuerpo y habilita nuevos usos que resultaban inviables anteriormente, sin poner en riesgo al mismo tiempo los estándares de seguridad humana.
Según un artículo publicado en Interesting Engineering, se documentaron más de una docena de experimentos para probar el nuevo sistema, demostrando que el suministro de energía puede mantenerse en una diversidad de ubicaciones y distancias sobre el cuerpo, a pesar de la pequeña placa receptora utilizada.
Los investigadores creen que la energía a través de la piel tiene el potencial de aumentar la practicidad y la vida útil de muchos sistemas, aunque aún se requieren nuevos desarrollos para que se encuentre disponible para el consumo masivo. La radiofrecuencia es un tipo de radiación electromagnética no ionizante, que el cuerpo humano absorbe de los aparatos que la emiten, como por ejemplo los smartphones. Hasta el momento, no se han comprobado efectos perjudiciales para la salud, aunque existen opiniones contrarias al respecto.
Fuente: levante-emv.com