Si eres de esas personas a las que les encanta decir que ya no se hacen cosas como antes: ni se fabrican coches como los de antaño, ni la Coca-Cola sabe igual y horror, ¡ni los discos suenan como los de los 80! Tenemos que darte la razón: el pop nunca había sido tan triste como hasta ahora. Aunque siempre tienes un consuelo: los discos de vinilo ahora suenan mejor que nunca.
Pero para descubrirlo hay que echar la vista atrás y verlo con perspectiva, como han hecho unos investigadores, que han tenido que analizar las canciones pop desde la década de los 80 hasta la fecha para comprobar que efectivamente, tumbarse en la cama para llorar a tu viejo amor mientras escuchas música jamás había sido tan efectivo como en la actualidad. Sorprendentemente, antes tampoco era tan bailable.
Este hallazgo ha sido publicado por la Royal Society Open Science y en el se constata cómo medio millón de grandes hits que han saturado las emisoras de radio y las listas de éxitos inglesas entre 1985 y 2015 son cada vez más melancólicos.
Pero, ¿cómo determinar que una canción es más triste que otra? ¿qué clase de cobaya humana se habrá expuesto a la escucha non-stop de los Janet Jackson o Take That de turno para determinarlo? Afortunadamente para la humanidad, existen las máquinas. Y entre todas ellas, hay una lo suficientemente inteligente y con capacidad de aprender como es el machine learning, que es entrenado para detectar ciertos parámetros y convertirse en el Tony Aguilar del software.
Así ha cambiado el pop en los último 30 años
Los investigadores de la Universidad de Irvine en California lo tienen claro: las canciones alegres y felices en el pop están de capa caída, lo que se lleva ahora es el drama. Otra cosa que también ha disminuido en estas décadas es la masculinidad de las letras. Hablamos del pop, claro está. Porque el reggaeton es otra historia.
En cuanto a éxitos, que para los investigadores son aquellos temazos que permanecieron en el top 10 durante varias semanas, estos generalmente han sido más felices, festivos y más femeninos que otra cosa. ¡Larga vida a las Spice Girls!
Según el paper, del cual Mashable se hace eco:
“El público parece preferir canciones felices, a pesar de que cada vez hay canciones tristes e infelices”.
No hay más que hacer un poco de memoria y pensar qué es lo que está arrasando ahora: Sam Smith, Adele, Ed Sheeran… y compararlo con los Eurythmics o Wham! de aquellos horteras y maravillosos 80.
Probablemente lo más interesante de este estudio es que estos investigadores parecen haber dado con la fórmula del éxito en el pop. Al final, la música no dejan de ser matemáticas: timbres diferentes, ritmos y notas que se repiten periódicamente y que, desmenuzados y analizados desde la escrupulosidad del machine learning que tiene en cuenta las últimas décadas, ya ha dado con un un patrón que se repite con demasiada frecuencia.
Sin embargo, no lo han hecho público… pero deberíamos estar atentos por si el próximo proyecto de estos investigadores es un álbum musical.
Otro ingrediente clave para el éxito es menos innovador: se trata de la variable «superstar», o lo que es lo mismo, que los artistas que ya habían lanzado un hit durante los cinco años anteriores tenían un 85% más de posibilidades de repetir. Esta era fácil hasta para los simples mortales, así que imagínate para la inteligencia artificial. Aquí lo difícil es llegar.
Fuente: urbatecno.com