El humanoide bautizado como Emo, fue capaz de replicar con gran exactitud los movimientos faciales que se le enseñaron, incluso parpadeó, sonrió y lloró
Ahora, los científicos de la universidad de Columbia en New York, han dado un enorme paso para avanzar en el desarrollo de una máquina que tenga estas cualidades. De hecho, Emo puede “predecir” la sonrisa de una persona buscando signos sutiles en su cara imitándolos, para que efectivamente sonría al mismo tiempo y lograr una comunicación fluida.
“Creemos que los robots deben aprender a anticipar e imitar las expresiones humanas como primer paso antes de madurar hacia una comunicación expresiva más espontánea y autónoma”, afirman los investigadores.
La gran mayoría de las máquinas humanoides que se están desarrollando actualmente en todo el mundo, están siendo entrenadas para imitar el rostro de un ser humano.
Pero además, Emo tiene la gran ventaja de “predecir” cuándo sonreirá la persona que tienen enfrente, y así poder sonreír al mismo tiempo. Para sus desarrolladores, esto crea una interacción “más genuina”, similar a la humana, entre máquina y persona.
“Imagínese un mundo en el que interactuar con un robot sea tan natural y cómodo como hablar con un amigo”, afirmó Hod Lipson, director del Creative Machines Lab.
Emo, está cubierto con una especie de piel de silicona azul, pero debajo de esta capa hay 26 pequeños motores que impulsan movimientos realistas, similares a los músculos de un rostro humano.
También posee cámaras de alta resolución dentro de la pupila de cada ojo, que logran captar las expresiones faciales del ser humano.
Para entrenar a Emo, el equipo reprodujo vídeos de expresiones faciales humanas para que el robot los observara fotograma a fotograma durante unas horas.
Fuente: latercera.com