Cuando Carlos Taboada le propuso -para su tesis doctoral- indagar sobre el pigmento verde de las ranas arborícolas, quedó fascinado. Julián Faivovich es el jefe de la división de herpetología en el Museo Argentino de Ciencias Naturales, lugar en donde se descubrió la fluorescencia de las ranas arborícolas.
«Soy investigador principal del CONICET con lugar de trabajo en el Museo Argentino de Ciencias Naturales y jefe de la división que concentra las colecciones de anfibios y reptiles y donde están los investigadores que trabajan en estas áreas», explicó Faivovich.
El descubrimiento que lideró provocó un verdadero impacto internacional. Si bien existen múltiples animales con brillo propio, nada se sabía de las ranas. Hasta ahora. «La fluorescencia fue descubierta en el Museo de Ciencias Naturales, en donde se indagó sobre el pigmento verde que presentan impregnados en sus tejidos las ranas arborícolas».
El científico agregó: «Nos dimos cuenta que era muy importante lo que estábamos descubriendo y en la tesis misma se comenzó a intentar dilucidar este fenómeno». Allí se encontró la Hypsiboas punctatus, una especie de rana arborícola con amplia distribución en toda Sudamérica.
Entre los vertebrados, la fluorescencia solo se conocía en varios grupos de peces, sin los detalles de cómo ese brillo se producía. Entre vertebrados con cuatro miembros o tetrápodos, el fenómeno es todavía mucho más infrecuente. Solo se habían presentado pocos casos de especies de loros y tortugas marinas.
«Este tipo de compuesto fluorescente es distinto a todo tipo de compuesto que se conoce en los animales hasta ahora. Esto hace más interesante el hallazgo. La naturaleza de estos compuestos, en varios casos, no es conocida. Los que sí se conocen son diferentes a los que hemos encontrado en las ranas», afirmó el investigador principal del CONICET.
Faivovich es licenciado en Ciencias Biológicas por la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales en la Universidad de Buenas Aires. «Hice mi doctorado en Nueva York, lo presenté en 2005 y más tarde hice un posdoctorado en Brasil, reincorporándome en Argentina en 2008».
Ante la cantidad de ofertas de diversas entidades del mundo para trabajar y ser parte del equipo de investigadores de diferentes países, Faivovich tenía en claro cuál era su objetivo: «Nunca consideré quedarme en el exterior, porque me fui de Argentina con ganas de volver. Tenía un compromiso grande, así que fui, hice lo que tenía que hacer y volví a realizar lo que me gusta en mi país», sostuvo.
Su investigación fue publicada en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), en donde el equipo de investigación detectó ejemplares jóvenes y adultos de la peculiar rana. Una vez que se los iluminaba con una luz de tipo UV-A/azul generaban una intensa fluorescencia verde azulada a su alrededor.
Sin dudas, es el primer hallazgo de una serie de descubrimientos futuros que tendrán a la ciencia argentina como protagonista. «Los últimos años han sido los más provechosos en la ciencia y técnica del país, con un aumento de investigadores en la planta del CONICET. Fue un período de crecimiento, que dieron frutos y en donde hay científicos de nivel internacional».
Fuente: infobae.com