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UNAM presenta el mundo microscópico a través de la realidad virtual

Corina Diana Ceapa y Daniel Finkelstein Shapiro, son las mentes detrás del proyecto: ‘Conviviendo con moléculas’

¿Te imaginas ver un mundo totalmente diferente al que ves a diario?

Pues gracias al gran talento de Corina Diana Ceapa y Daniel Finkelstein Shapiro, esto ya es posible.

A través del proyecto ‘Conviviendo con moléculas’, ambos investigadores del Instituto de Química (IQ) de la UNAM ofrecen un vistazo fascinante del mundo de lo microscópico a través de la Realidad Virtual (RV) y Realidad Aumentada (RA).

En la última edición de la Noche de las Estrellas, celebrada en Ciudad Universitaria, Corina y Daniel fueron testigos, una vez más, del asombro que genera esta innovadora forma de explorar lo invisible a simple vista.

“Nos visitaron cientos, miles de personas. Y todos, igual, como que lo ves de nuevo y de nuevo, se quedan así: ‘¡Guau!'”, declaró en una entrevista Ceapa, quien también es bioquímica, bióloga molecular y microbióloga.

Para Finkelstein, lo que sucede es que al sobreponerle al mundo esa capa adicional, que es como funciona la RA, por ejemplo, ‘es como traer a la vida a la molécula’.

Esto detona una respuesta emocional que puede aprovecharse a nivel educativo y de divulgación para transformar cómo se percibe e interactúa con el intrincado mundo de la química. Y ese es, tal cual, el objetivo de ‘Conviviendo con moléculas’.

Combinando conocimientos

La iniciativa nació de años de dedicación y esfuerzo de dos destacados investigadores, cada uno con enfoques únicos pero complementarios.

Por un lado, Finkelstein ha aplicado la realidad aumentada (RA) en experiencias pedagógicas para hacer más accesibles y comprensibles los conceptos microscópicos de la química.

Según explica, su objetivo es ‘llevar estos conceptos a una escala más intuitiva’.

Por otro lado, Ceapa ha centrado su trabajo en el fascinante y desafiante mundo de las bacterias, investigando especialmente el problema crítico de la resistencia antimicrobiana: la alarmante capacidad de algunos microorganismos para resistir los efectos de los antibióticos.

Ya que la sola investigación científica no podrá por sí misma hacer frente a tal situación, los académicos del IQ buscan generar conciencia y participación ciudadana mediante su proyecto, cuyos modelos permiten un viaje interactivo por el mundo de las bacterias y los antibióticos, además de comprender cómo se genera la resistencia y así saber de qué forma combatirla.

Recibe apoyo monetario de la ‘par’

Dado el gran potencial de ‘Conviviendo con moléculas’ para hacer frente a este problema, Ceapa y Finkelstein recientemente resultaron seleccionados para recibir un apoyo económico de la Fundación para Prevenir la Resistencia a los Antibióticos (PAR, por sus siglas en inglés), entidad autónoma que impulsa actividades de investigación, educación e información.

Se trata de un estímulo de 200 mil coronas suecas -arriba de 371 mil pesos-, que permitirá a los investigadores continuar desarrollando su proyecto.

Un proyecto expansivo

Una característica importante del proyecto es el uso de la inteligencia artificial (IA) para que cada contenido se adapte de manera individual.

“(Es decir), puede haber una historia para los expertos, otra para los médicos, otra para los alumnos que apenas están comenzando a aprender sobre estos temas”, explica Ceapa.

Esto mismo hace que el potencial de ‘Conviviendo con moléculas’ vaya mucho más allá del mundo bacteriológico y microscópico, convirtiéndose en una herramienta para desplegar la información de forma lúdica en museos, congresos, escuelas y hasta como un asistente para personas con capacidades diferentes.

“Queremos adaptarlo y que más gente aproveche estas ideas y esta forma de enseñanza”, subraya Ceapa.

Por ahora, el proyecto ha logrado avanzar gracias al respaldo del Programa de Apoyo a Proyectos para Innovar y Mejorar la Educación (PAPIME) de la UNAM, así como al apoyo del capítulo México de la Marie Curie Alumni Association, organización a la que pertenecen los dos investigadores principales.

Además, un equipo comprometido de estudiantes ha contribuido con un esfuerzo que trasciende lo estrictamente científico, aportando una perspectiva integral al avance de esta iniciativa.

Fuente: sipse.com

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