Hace poco más de un mes de que un fallo en el Curiosity le había estado impidiendo enviar gran parte de los datos científicos y de ingeniería almacenados en su memoria, los científicos de la NASA han podido volver a ver imágenes emitidas por el róver en Marte.
Melissa Rice, planificadora a largo plazo del equipo de Curiosity, publicó esta semana una nueva actualización sobre dicha misión, en la que informó que el 29 de octubre fue el primer día que se reanudó la planeación con el equipo completo desde la anomalía, por lo que las operaciones científicas han sido retomadas.
“Ha pasado más de un mes desde la última vez que vimos el ‘espacio de trabajo’, la región frente al róver al que puede llegar el brazo, ¡y nos esperaban algunas sorpresas!”, escribió en el sitio web de la NASA, y agregó:
Antes de la anomalía, la roca estaba cubierta con relaves de color gris de nuestro intento fallido de perforar el objetivo ‘Inverness’, como se ve en la imagen de Mastcam del sol 2170. Sin embargo, en la nueva imagen de arriba, esos relaves ya no están, así como mucho del suelo marrón oscuro y el polvo rojizo. Así que mientras Curiosity ha estado quieto, los vientos se han estado moviendo, dejando el espacio de trabajo.
El equipo de Curiosity planea tomar imágenes en primer plano del área limpia para investigar los detalles en la roca, incluyendo “las venas más claras salpicadas de interesantes inclusiones oscuras”. Las cámaras del róver también mirarán a su alrededor para ver si puede detectar más cambios por el viento. Finalmente, Rice compartió que el Curiosity será conducido a otro lugar para perforar la roca gris.
A finales de mayo, una tormenta de polvo comenzó a formarse en Marte hasta envolver el planeta rojo por completo a mediados de junio. El fenómeno meteorológico provocó que el Opportunity entrara en modo hibernación, mientras que el Curiosity había estado estudiando el suelo marciano desde el cráter Galehasta que sus operaciones quedaron suspendidas en septiembre.
La nueva temporada de vientos en Marte podría durar varios meses. Mientras tanto, la NASA iniciará una nueva misión a finales de noviembre con la llegada prevista del InSight, cuyo objetivo es investigar la geología el planeta rojo, estudiando sus capas más profundas y escuchando los sonidos de los llamados Marsquakes, sucesos sísmicos parecidos a los terremotos terrestres.
Fuente: hipertextual.cm