La investigación desarrollada por el Instituto Wellcome Sanger alerta sobre algunas consecuencias del uso de esta revolucionaria técnica de “corta-pega”, que permite a los expertos eliminar y reemplazar secciones de ADN en las células de cualquier organismo, incluido el humano.
Además de su extendido uso en investigaciones científicas, el CRISPR/Cas9 ha dado resultados positivos en el diseño de terapias de edición del genoma para tratar el cáncer, el VIH o la falcemia.
Sin embargo, recuerdan, estudios anteriores no han detectado la existencia de mutaciones imprevistas en el ADN en la zona precisa de edición del genoma efectuada con el CRISPR/Cas9.
Extensas mutaciones
Por ello, los expertos del Wellcome Sanger acometieron un amplio estudio sistemático tanto en ratones como humanos y constataron que el CRISPR/Cas9 causa, a menudo, extensas mutaciones, si bien estas se localizan a cierta distancia del lugar de edición del genoma.
En consecuencia, muchas células genéticas sufrieron significativas reorganizaciones, con “borrados” e “inserciones” de ADN, lo que puede provocar que algunos genes clave se “activen” o “desactiven”.
Este trabajo, destacan, plantea interrogantes respecto al uso del CRISPR/Cas9 y debe abrir el camino para que la comunidad científica encuentre alternativas a este método estándar de edición genética.
“En mis primeros experimentos usé el CRISPR/Cas9 como herramienta para estudiar la actividad genética, sin embargo, se hizo evidente que algo inesperado estaba ocurriendo”, aportó Michael Kosicki, el experto al frente de esta investigación.
Fuente: EFEfuturo