¿Habías oído hablar de un perro momificado dentro de un árbol? Un grupo de madereros de The Georgia Kraft Corp al cortar la parte superior de un roble castaño lo descubrieron.
Vieron un perro de caza momificado, «observando» la salida, desde hace ¡20 años!
Lo que queda es un perro momificado, seco y petrificado en una triste y eterna lucha por escapar.
Un letrero explica que Stuckie fue descubierto en 1980 en un camión maderero después de que el roble castaño había sido cortado en troncos.
En lugar de enviar al perro a la planta de celulosa, los madereros lo donaron al Forest World. Es sorprendente la preservación de Stuckie, momificado durante aproximadamente 20 años hasta que fue descubierto.
En cuanto a cómo entró el perro allí, se estima que aproximadamente en el año 1960, el perro persiguiendo una presa,posiblemente ingresó por un agujero del árbol.
“La gente siempre me pregunta, ‘¿Cómo entró allí?’, dijo Brandy Stevenson, gerente de Forest World. “Y siempre digo: ‘Bueno, era un perro de caza. Tal vez estaba buscando un mapache’”, publicó Road Side América.
Sin embargo, el perro ¡Quedó atrapado! Nunca atrapó a su presa, nunca nadie lo vino a buscar y permaneció inmóvil en su trampa hasta que murió, según informa Bertha Sue Dixon, que dirige el museo llamado Southern Forest World.
En el Southern Forest World, «Stuckie», puede ser visto a través del cristal en el árbol donde todavía está aguardado el momento de salir a correr…
La antropóloga biológica de la Universidad de West Florida, Kristina Killgrove, explicó que la «tumba» de madera habría contribuido en el proceso de momificación.
“Cuando una persona o un animal muere, los microbios existentes en el cuerpo se salen de control y empiezan a reproducirse en vista de que los procesos biológicos que los mantenían a raya ya no existen, entonces los microorganismos en el intestino comienzan el proceso de putrefacción”, según el sitio web Codigo Oculto.
Pero a Stuckie esto no le ocurrió, ya que los robles castaño contienen tanino que se utiliza para curtir pieles de animales y evitar la descomposición. El tanino es un «desecante» natural o material que absorbe la humedad y seca su entorno.
Algo más que ayudó a evitar la descomposición: fue la posición y la forma del árbol. Debido a esto, el aire pudo soplar hacia arriba, se produjo un efecto de chimenea en el árbol hueco y esto provocó que el olor del animal muerto se fuera, lo que de otro modo habría atraído insectos y otros organismos que se alimentan de animales muertos.
El árbol hueco también proporcionó condiciones relativamente secas.
Así es como Stuckie, a punto de saltar hacia fuera…, permanecerá para siempre.
Fuente: lagranepoca.com