Usando enfoques totalmente diferentes, dos equipos de investigación han confirmado por separado que el níquel 78 es un isótopo doblemente mágico.
En el primer esfuerzo, un equipo internacional dirigido por Louis Olivier en el National Institute of Nuclear and Particle Physics de Francia produjo un núcleo de cobre-79 y lo utilizó como un marco para describir el níquel-78. En el segundo esfuerzo, un equipo con miembros de toda Europa se acercó al problema mediante el uso de una técnica avanzada de pesaje. Ambos equipos publicaron sus resultados en la revista Physical Review Letters.
En el mundo de la física, los números mágicos describen protones o neutrones en proyectiles orbitales separados por los mayores espacios de energía. Cuando ambos protones y neutrones son mágicos, el núcleo se considera doblemente mágico.
En su búsqueda por comprender la materia, los científicos han estudiado núcleos mágicos y doblemente mágicos y han descubierto que algunos son particularmente difíciles de precisar. Nickel-78 es un buen ejemplo. El estudio se ha visto obstaculizado por su tendencia a ser de corta duración y la dificultad de producirlo en absoluto. En este nuevo esfuerzo, ambos equipos han recurrido a trucos para demostrar que, de hecho, es doblemente mágico.
En la primera aproximación, el equipo dirigido por Olivier usó una reacción de eliminación directa para expulsar un protón de un proyectil de zinc-80, dando como resultado un núcleo de cobre-79. Luego usaron los cálculos del modelo de caparazón para mostrar que el cobre-79 podría caracterizarse como un núcleo doblemente mágico de níquel-78 con un protón añadido.
En el segundo enfoque, el equipo midió la masa de los isótopos de cobre en una cadena de cobre-75 a 79 utilizando tecnología en el CERN. Usaron lo que encontraron para mostrar que el cobre-79 puede caracterizarse como un protón individual sentado encima de un núcleo doblemente mágico de níquel-78.
Si bien los métodos utilizados por el segundo equipo fueron bastante diferentes, los resultados estuvieron de acuerdo, el níquel-78 es, de hecho, doblemente mágico. Este no es el final de la historia, sin embargo, porque ambos estudios involucraron enfoques indirectos. Por lo tanto, el níquel-78 no se considerará probado como doblemente mágico hasta que pueda mostrarse directamente. Para hacer eso, algún equipo de investigación deberá producirlo en un laboratorio de una manera que permita realizar pruebas directas.
Fuente: Europa Press