Un nuevo método para viajar en el tiempo ha sido elaborado por científicos de Canadá y Estados Unidos. Se trata de un modelo matemático que supera anteriores obstáculos para hacerlo teóricamente posible, según se explica en un comunicado de la Universidad de la Columbia Británica.
Estos investigadores, Ben Trippet, de la citada universidad, y David Tsang, de la Universidad de Maryland, explican en un artículo publicado en Classical and Quantum Gravity, que se han basado en la Teoría de la Relatividad General de Einstein para elaborar su modelo.
Su idea se basa, por un lado, en que el universo no puede contemplarse únicamente como si estuviera constituido sólo por tres dimensiones, sino que la cuarta dimensión, el tiempo, forma parte integral de las otras tres.
La división del espacio en tres dimensiones, con el tiempo en una dimensión separada por sí misma, es incorrecta, dice Tippett. Las cuatro dimensiones deben ser imaginadas simultáneamente, en las que diferentes direcciones están conectadas, como un continuo espacio-tiempo.
Utilizando la teoría de Einstein, Tippett dice que la curvatura del espacio-tiempo explica las órbitas curvas de los planetas. En el espacio-tiempo «plano» -o no curvo-, los planetas y las estrellas se moverían en línea recta. En las proximidades de una estrella masiva, la geometría del espacio-tiempo se curva y las trayectorias rectas de los planetas cercanos seguirán la curvatura y se doblarán alrededor de la estrella.
Burbuja espacio-temporal
La dirección temporal de la superficie espacio-tiempo también muestra curvatura, pues hay evidencias que muestran que cuanto más cerca estamos de un agujero negro, el tiempo se mueve más lento, explica Tippett.
Para aprovechar esta propiedad teórica, los físicos proponen crear una especie de «burbuja» de la geometría espacio-temporal, que lleva lo que hay dentro a través del espacio y el tiempo, a lo largo de un gran camino circular.
Si esta burbuja puede alcanzar velocidades mayores que la velocidad de la luz -algo que dicen es matemáticamente posible- esto le permitiría retroceder en el tiempo. «Es una caja que viaja hacia delante y luego hacia atrás en el tiempo a lo largo de un camino circular a través del espacio-tiempo», explican los investigadores en su artículo.
Un observador externo vería dos versiones de los objetos dentro de la máquina del tiempo: una versión que evoluciona hacia delante en el tiempo y la otra hacia atrás.
Bases matemáticamente sólidas, pero…
Aunque Tippett y Tsang dicen que las bases matemáticas de su modelo son sólidas, en realidad no disponemos de los materiales adecuados para construir la burbuja de la geometría espacio-temporal que proponen.
«Si bien es matemáticamente factible, todavía no es posible construir una máquina espacio-temporal porque necesitamos materiales -que llamamos materia exótica- para doblar el espacio-tiempo en estas formas imposibles, algo que todavía no se han descubierto», dice Tippett.
«Estudiar el espacio-tiempo es fascinante y problemático y también es una manera divertida de usar matemáticas y física», dice Tippett. «Expertos en mi campo han estado explorando la posibilidad de máquinas matemáticas de tiempo desde 1949. Y mi investigación presenta un nuevo método para hacerlo».
«La gente piensa en el viaje en el tiempo como algo de ficción», dice Tippett. «Y tendemos a pensar que no es posible porque realmente no lo hacemos, pero, matemáticamente, es posible», agrega.
Fuente: tendencias21.net