Los pájaros se están volviendo cada vez más pequeños como consecuencia del cambio climático.
Así lo aseguran ornitólogos del Museo Field de Chicago, en Estados Unidos, que estudiaron muestras de más 70.000 especímenes desde el año 1978.
Durante cuatro décadas, Dave Willard y los miembros de su equipo se levantaron a las 3:30 de la mañana con el objetivo de recoger del piso las aves que habían muerto al chocar con edificios en la ciudad estadounidense.
En total, los investigadores analizaron los 70.716 ejemplares de 52 especies de aves migratorias de América del Norte recolectadas durante esos 40 años.
Según sus autores, se trata del estudio más grande de su tipo y arroja resultados importantes para comprender cómo los animales se adaptan al cambio climático.
“Descubrimos que casi todas las especies se estaban volviendo más pequeñas”, dice el autor principal del estudio, Brian Weeks, profesor asistente en la escuela de Medio Ambiente y Sostenibilidad de la Universidad de Michigan.
“Las especies eran bastante diversas, pero respondían de manera similar”, afirma, agregando que la coherencia “fue impactante”.
Weeks sostiene además que los estudios sobre las respuestas del mundo animal al calentamiento global suelen centrarse en cambios geográficos o en eventos como la migración y el nacimiento.
Pero este trabajo sugiere que la morfología corporal es un aspecto crucial.
Un 2,4% más pequeños
El estudio, que se llevó a cabo entre 1978 y 2016, muestra que la longitud del hueso inferior de las aves, una medida común para calibrar el tamaño del cuerpo, se redujo en un 2,4%.
Pero sus alas se alargaron un 1,3% durante ese mismo periodo.
La evidencia sugiere que el aumento de las temperaturas causa la disminución del tamaño del cuerpo, lo que a su vez provoca un incremento de la longitud del ala.
Sobre la migración, que Weeks encuentra particularmente dura para las aves, el experto explica que los cuerpos más pequeños son más eficientes para viajes largos.
Y agrega que las aves con más probabilidades de sobrevivir han sido las que tienen alas más largas, que se compensan con cuerpos más pequeños.
Los científicos no están completamente seguros de por qué temperaturas más altas hacen que las aves se encojan. Una teoría es que los animales más pequeños pierden calor corporalmás rápidamente debido a su relación superficie-volumen.
En 1978, Willard comenzó a caminar cada mañana por las calles de Chicago durante la migración de primavera y otoño para recolectar las aves que habían chocado con los edificios.
Otras especies también se estarían encogiendo
Las aves generalmente migran de noche y se sienten atraídas por la luz artificial de los edificios, causando colisiones fatales con las ventanas. Se calcula que cientos de millones de aves mueren en colisiones con edificios cada año.
Weeks dice que no preveía los resultados que terminó arrojando la investigación. “Simplemente pensé que podría ser útil en el futuro”.
Con los años, muchos voluntarios y científicos contribuyeron a los esfuerzos de recolección.
Willard midió los 70.716 especímenes utilizando siempre los mismos métodos, “el estándar de oro” para este tipo de datos, explica Weeks.
Este estudio fue originalmente publicado en la revista científica Ecology Letters.
Se basa en crecientes evidencias que denuncian que los animales se están encogiendo a medida que el clima se calienta.
En 2014, un grupo de investigadores aseguró que el tamaño de las cabras alpinas parece estar reduciéndose debido al calentamiento global.
Ese mismo año, otro estudio afirmó que las salamandras también se están volviendo más pequeñas.
Fuente: BBC