La imagen original es una foto en blanco y negro, donde se puede ver el reflejo de un astronauta en la cubierta de vidrio del traje de otro astronauta, que lo está enfocando con una cámara. Ambos están en la Luna.
Después, la imagen se convirtió en un cuadro llamado «Una nueva frontera», y muestra colores que no se ven en la foto original, pero que estaban en la mente del pintor como un recuerdo vívido, porque el hombre de la imagen es él: Alan Bean, el cuarto hombre en caminar por la Luna y, como se autodenominó, «el primer artista en otro mundo».
Este sábado, la familia de Bean anunció la muerte del reconocido astronauta y pintor, tras una rápida enfermedad. A los 86 años, el norteamericano falleció en Houston, Texas, en compañía de su familia y amigos.
«Estamos tristes por la muerte del astronauta Alan Bean, la cuarta persona en caminar en la Luna. Pasó más de diez horas en la superficie lunar durante Apolo 12», comunicó la NASA a través de su cuenta de Twitter.
Era piloto en la Marina de EE.UU. cuando fue seleccionado como uno de los 14 aprendices para conformar el tercer grupo de astronautas en octubre de 1963. Voló dos veces al espacio, primero en la segunda misión que llegó a la Luna en 1969 y después hasta la primera estación espacial de EE.UU. en 1973.
Durante sus caminatas lunares, Bean ayudó a desplegar varios experimentos en la superficie e instaló el primer generador nuclear para proporcionar una fuente de energía. Junto a otro tripulante, inspeccionaron una nave espacial robótica y recogieron 34 kilos de rocas y suelo lunar para estudiar en la tierra.
Después de su retiro de la NASA en 1981, el astronauta se dedicó por 40 años a realizar un registro artístico de la primera exploración de la humanidad en otro mundo. Sus pinturas, todas sobre las expediciones Apolo, eran lienzos con textura que representaban impresiones de botas en la luna, astronautas o paisajes.
Fuente: Agencias