Los investigadores han filmado por primera vez directamente cómo producen su extraordinaria gama de sonidos, según un nuevo estudio publicado en la revista ‘PLoS Biology’
Los murciélagos producen una gama extremadamente amplia de frecuencias sonoras que supera con creces la capacidad humana, incluida la de vocalistas como Mariah Carey, Axil Rose o Prince.
Ahora los investigadores han filmado por primera vez directamente cómo producen su extraordinaria gama de sonidos, según un nuevo estudio publicado en la revista ‘PLoS Biology’. Los investigadores aún no conocen el significado de todos sus sonidos y cantos, pero cada vez aprenden más sobre cómo se producen.
Ahora, el nuevo estudio informa de que, para algunos sonidos, los murciélagos utilizan la misma técnica que los cantantes humanos de death metal y los miembros del pueblo Tuva de Siberia y Mongolia que cantan con la garganta.
El estudio procede de un equipo de investigación de la Universidad del Sur de Dinamarca, dirigido por el profesor Coen Elemans, del Departamento de Biología. El equipo ha filmado por primera vez lo que ocurre en la laringe de un murciélago cuando produce un sonido.
«Hemos identificado por primera vez qué estructuras físicas dentro de la laringe oscilan para emitir sus diferentes vocalizaciones. Por ejemplo, los murciélagos pueden hacer llamadas de baja frecuencia, utilizando sus llamadas «falsas cuerdas vocales», como hacen los cantantes humanos de death metal», explica Coen Elemans.
Las falsas cuerdas vocales se llaman así porque parecen cuerdas vocales, pero no se utilizan en el habla y el canto humanos normales. Sólo los gruñidores de death metal y los cantantes de garganta de algunas culturas del mundo utilizan sus falsas cuerdas vocales como los murciélagos. Los humanos mueven las cuerdas vocales hacia abajo para que oscilen junto con las cuerdas vocales.
«Esto hace que las cuerdas vocales sean más pesadas y, por tanto, vibren a frecuencias muy bajas», explica el postdoctorado Jonas Hakansson, primer autor del estudio.
Los murciélagos suelen emitir gruñidos cuando entran o salen de un dormidero densamente poblado. Los investigadores no saben con certeza qué pretende comunicar un murciélago que gruñe cuando utiliza sus falsas cuerdas vocales para producir sonidos graves en el rango de 1 a 5 kHz.
«Algunos parecen agresivos, otros pueden ser una expresión de molestia y otros pueden tener una función muy diferente. Todavía no lo sabemos», afirma el biólogo y experto en murciélagos Lasse Jakobsen, de la Universidad del Sur de Dinamarca, coautor del estudio.
Cuando los murciélagos cazan insectos en plena oscuridad, utilizan la ecolocalización. Envían llamadas muy cortas y de muy alta frecuencia, y escuchan los ecos reflejados por los objetos del entorno para encontrar y capturar insectos.
«Un murciélago puede determinar la forma, el tamaño y la textura de los objetos que se reflejan en el eco en cuestión de milisegundos», afirma Lasse Jakobsen. El estudio también revela por primera vez cómo los murciélagos son capaces de realizar sus llamadas de ecolocalización de extraordinaria frecuencia. Lo hacen mediante la vibración de membranas vocales muy finas, estructuras que también tuvimos los humanos, pero que se perdieron en nuestra evolución.
«Hemos filmado directamente estas membranas vocales por primera vez. Para mostrar sus vibraciones tuvimos que filmar a velocidades extremadamente altas, hasta 250.000 fotogramas por segundo. Vemos muchas adaptaciones en la laringe, que creemos que son responsables de la capacidad de los murciélagos de hacer llamadas de muy alta frecuencia y muy rápidas, para poder atrapar insectos mientras vuelan», afirma Jonas Hakansson.
Según el equipo de investigación, el rango vocal normal de un murciélago abarca 7 octavas. «Esto es extraordinario. La mayoría de los mamíferos tienen un rango de 3 a 4, y los humanos unos 3. Algunos cantantes humanos pueden alcanzar un rango de 4 a 5, pero son muy pocos. Ejemplos conocidos son Mariah Carey, Axl Rose y Prince. Resulta que los murciélagos superan este rango utilizando diferentes estructuras en su laringe», concluye Coen Elemans.
Fuente: EP