«Si una especie extraterrestre llega a ser lo suficientemente avanzada como para enviar señales que los terrícolas pueden captar, es probable que haya prescindido de sus aparatos biológicos tradicionales para convertirse en una forma de inteligencia cibernética», afirma el veterano cazador de alienígenas Seth Shostak.
Para apoyar esta hipótesis, Shostak señaló el camino que ha emprendido la Humanidad. La especie humana inventó la radio alrededor de 1900 y el ordenador en 1945, y ya está fabricando dispositivos relativamente baratos con mayor poder de computación que el cerebro humano.
El desarrollo de la verdadera inteligencia artificial (AI), por lo tanto, no está demasiado lejos, opinan expertos. El famoso futurista Ray Kurzweil, por ejemplo, ha fijado 2045 como el año en que esta «singularidad» se habrá consumado, informa Space.com.
«Pero tal vez sea en 2100, o 2150, o 2250. No importa», dijo Shostak durante una presentación en la reciente conferencia Dent:Space en San Francisco. «La cuestión es que cualquier sociedad que invente la radio, y que podamos escucharla, en pocos siglos, habrá inventado a sus sucesores, y creo que eso es importante porque los sucesores son máquinas».
Prescinden del ‘wetware’
La Inteligencia Artificial se conectará con los cuerpos de la gente por un tiempo, pero eventualmente los humanos abandonarán el ‘wetware’ y se volverán completamente digitales, predijo Shostak.
«Será como construir un motor de cuatro cilindros, lo pones en un caballo para conseguir un caballo más rápido y muy pronto dices: ‘Mira, vamos a deshacernos de la parte del caballo y construimos un Maserati’,» expuso Shostak, astrónomo del Instituto de Inteligencia Extraterrestre (SETI) en Mountain View, California. Eso es probablemente lo que va a suceder.
Los seres humanos resultantes serán más inteligentes y más capaces increíblemente rápido, añadió. La inteligencia actual de la humanidad es el resultado de 4.000 millones de años de evolución darwiniana, que utiliza la variación aleatoria como su materia prima y no está dirigida hacia ninguna meta en particular. Pero la evolución de la inteligencia de la máquina será diseñada y eficiente, dijo Shostak.
Esta idea tiene serias implicaciones para la búsqueda de la vida alienígena inteligente. A diferencia de los organismos terrestres, las máquinas extraterrestres superavanzadas no necesitarían agua u otros productos químicos para sobrevivir, por lo que no estarían estrechamente ligados a los mundos de sus antepasados, dijo Shostak. Y viajar enormes distancias no sería un gran problema para estas máquinas, siempre que pudieran acceder a suficiente energía y materias primas para mantenerse reparándose a lo largo de los milenios, dijo.
«Seguimos buscando en las direcciones de los sistemas estelares que creemos que tienen planetas habitables, donde la biología podría avanzar y eventualmente convertirse en algo inteligente. Pero no creo que vaya a ser así», advirtió.
Shostak dijo que no está aconsejando a sus compañeros astrónomos de SETI que dejen de investigar planetas potencialmente terrestres como Proxima b, un mundo recientemente descubierto que se encuentra a sólo 4,2 años luz de distancia. (Formas de vida sencillas podrían todavía habitar esos mundos incluso si sus habitantes más inteligentes fueron digitales y se fueron hace mucho tiempo, dijo Shostak). Pero puede ser una buena idea expandir la búsqueda a regiones del espacio que aparentemente serían atractivas para las formas de vida digitales, dijo; por ejemplo, lugares con mucha energía disponible, como los centros de galaxias.
Es posible que allí estén los seres realmente inteligentes -dijo Shostak-. «Tal vez lo que debemos hacer es mirar lugares en el cielo que conectan dos lugares donde hay mucha energía», en un intento de interceptar las comunicaciones entre máquinas extraterrestres, agregó Shostak.
Fuente: Europa Press