La nave espacial rusa Soyuz MS-22, que sufrió fugas de refrigerante acoplada a la Estación Espacial Internacional, regresó a la Tierra este 28 de marzo.
La Soyuz MS22 aterrizó de forma automatizada y asistida por paracaídas en Kazajstán a las 11.46 UTC, menos de dos horas después de completar una misión de seis meses acoplada al módulo Rassvet del compleo orbital, informa la NASA.
Esta nave transportó al espacio al astronauta de la NASA Frank Rubio y a los cosmonautas de Roscosmos Sergey Prokopyev y Dmitri Petelin tras despegar del cosmódromo de Baikonur (Kazajstán) el 21 de septiembre del año pasado.
El 14 de diciembre sufrió una fuga de refrigerante en su extremo de popa. Esto provocó una caída de presión en el sistema de suministro de calor de la nave espacial. Rusia envió una Soyuz de rescate el 24 de febrero sin tripulantes, para devolver a la Tierra en septiembre a los tripulantes que viajaron en la nave averiada.
Ya en la Tierra, la Soyuz MS22 será analizada por Roscosmos, cuya investigación preliminar atribuyó la fuga a un impacto externo y no a defectos en el diseño o la fabricación.
Fuente: europapress.es