Un estudio realizado por el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca (Irnasa-CSIC), en el marco de la Plataforma Temática Interdisciplinar (PTI) Salud Global del CSIC y publicado en la revista International Journal of Molecular Science (IJMS), determina que antígenos del helminto Fasciola hepatica presentan efectos antivirales contra SARS-CoV-2 in vitro.
Los helmintos son gusanos parásitos de gran tamaño que pueden infectar a los seres humanos, “siendo responsables del desarrollo de enfermedades en más de dos mil millones de personas en el mundo”, ha indicado el Irnasa en la información facilitada a Europa Press.
“Dados los puntos de coincidencia que tienen muchos patógenos al generar una respuesta inmune en el huésped”, este grupo de investigadores ha propuesto que la infección por helmintos “puede influir en la respuesta ante otras enfermedades infecciosas concurrentes, específicamente en la infección por SARS-CoV-2, con potencial para generar nuevos antivirales”, ha dicho.
En este estudio, en el que también ha participado el Instituto de Biología Integrativa de Sistemas (I2SysBio, centro mixto CSIC-Universidad de Valencia) se utiliza la especie Fasciola hepatica, helminto parásito con un ciclo de vida complejo que puede infectar a humanos, “produciendo fasciolosis, causada por la ingestión de metacercarias (su forma larvaria) en agua o plantas acuáticas”, ha reseñado el Irnasa.
Al respecto, ha añadido que “las larvas ingeridas exquistan en el duodeno y liberan FhNEJ, y luego continúan su desarrollo hasta llegar a la edad adulta en los conductos biliares, pudiendo causar daños en los tejidos”.
Tras ello, en explicación del proceso, ha apuntado que los FhNEJs inducen “cambios” en las proteínas de las células huésped relacionadas con el tráfico mediado por vesículas y “una regulación positiva de la respuesta inmune mediada por interferones del tipo I (IFN)”.
Influencia en covid
Ambas respuestas están “directamente relacionadas” con la entrada celular y replicación de SARS-CoV-2, por lo que la hipótesis del estudio es que la infección por Fasciola hepatica “puede tener influencia en la posterior infección por el virus del COVID”, ha continuado.
Para evaluar esta hipótesis, los investigadores han usado células Vero pretratadas con extracto de antígeno de FhNEJ enriquecido con tegumento (FhNEJ-TEG) y han observado una reducción en la infección por partículas de VSV (virus de la estomatitis vesicular) pseudotipadas con la proteína S del SARS-CoV-2 (VSV-S2).
Estos resultados se han comprobado con un modelo in vitro, “utilizando infecciones reales de SARS-CoV-2” y el Irnasa ha destacado que la actividad antiviral observada en el tratamiento con FhNEJ-TEG es “similar a la obtenida gracias al tratamiento con remdesivir, uno de los pocos fármacos aprobados actualmente para tratar la COVID-19”.
Además de ello, han tratado las células Vero después de la infección con VSV-S2 y también han observado “una reducción en la infección”, lo que, según sus palabras, “sugiere que FhNEJ-TEG puede afectar también en las etapas de infección posteriores a la entrada”.
Agentes terapéuticos
En conjunto, “estos datos sugieren que se podría fomentar la producción de moléculas derivadas de FhNEJ para ser aplicadas como agentes terapéuticos contra SARS-CoV-2 y otros virus respiratorios emergentes, dada su capacidad de alterar su infectividad”, ha aseverado el instituto salmantino.
Esta investigación ha sido financiada por fondos Next Generation de la Comisión Europea a través de la PTI Salud Global del CSIC, por el Ministerio de Ciencia e Innovación de España (Proyectos AGL2015-67023-C2-2-R y PID2019-108782RB-C22) y por el Proyecto ‘CLU-2019-05_Unidad de Excelencia IRNASA/CSIC’, financiado por la Junta de Castilla y León y cofinanciado por la Unión Europea.
Fuente: europapress.es